Archivo - Embalse de Monte Félix-Toril.en Almonaster la Real, Huelva, durante los trabajos de emergencia del pasado mes de enero. - Rocío Ruz - Europa Press - Archivo
ALMONASTER LA REAL (HUELVA), 14 (EUROPA PRESS)
El embalse de Monte Félix-Toril, situado en el término municipal de Almonaster la Real (Huelva) continúa a la espera de una solución definitiva después de que el pasado mes de enero se detectara una grieta como consecuencia de la acumulación de agua que dejó en la zona el paso de la borrasca Garoé y por la que más de cien vecinos de la pedanía Cueva de la Mora tuvieron que ser desalojados.
De este modo, según ha indicado el Ayuntamiento de Almonaster a Europa Press, se ha encargado un estudio de inundabilidad para ver las posibles soluciones, mientras que desde Giahsa, que tiene la concesión de aprovechamiento del agua para abastecer a los vecinos de esta pedanía y de la de Monteblanco --del mismo municipio--, han indicado que la intención es desistir de ese dique y realizar obras de conducción desde el embalse de Cueva de la Mora para abastecer a ambas pedanías, ya que hace unos años se realizaron obras de arreglo en el mismo y cuenta con mayor capacidad que el Monte Félix-Toril.
En este sentido, el director ejecutivo de Giahsa, Santiago Ponce, ha explicado que hubo una reunión en verano entre la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Almonaster y Giahsa y se indicó que "la responsabilidad de la presa del Toril es del Ayuntamiento" y que hay "dos opciones" sobre esta que son "acometer los trabajos de reparación, adaptación y mantenimiento" o "el desmontaje de la misma" pero que "la actuación sobre el dique, más el aprovechamiento, es inasumible", por lo que "se instó" al Consistorio "a su desembalse y posterior demolición".
Por ello, la empresa pública de aguas de la provincia y la Junta están "trabajando desde hace tiempo" con la intención de llevar a cabo las obras de conducción desde el embalse de Cueva de la Mora, ya que a la empresa pública "lo que le compete es la garantía de suministro del agua" a los vecinos de las pedanías y "desde hace tiempo se veía que no se podía seguir sosteniendo a través de la presa del Toril", toda vez que ha apuntado que la grieta "no se abrió" en enero con las lluvias, sino que "hay informes de la Junta que alertan de ella desde al menos 2007 o 2008".
Al respecto, ha señalado que "se trasladó a la Junta la necesidad de garantizar este abastecimiento a través del embalse de Cueva de la Mora", de tal forma que "se realizó un proyecto, se presentó" y la administración andaluza "lo recogió dentro de las obras de interés de la comunidad autónoma dentro del cuarto decreto de sequía" para que el abastecimiento llegue desde Cueva de la Mora y no desde la pesa del Toril".
En este sentido, ha indicado que para avanzar en la ejecución de esas obras de conducción, Giahsa "está trabajando con la Junta de Andalucía en un convenio interadministrativo". Así, la empresa pública ejecutaría las obras necesarias, adelantando los fondos, que luego repondrá la administración andaluza.
Por su parte, el alcalde de Almonaster la Real, Jacinto Vázquez, ha explicado que el Ayuntamiento está interesado en que el embalse Monte Félix-Toril continúe funcionando y "está viendo que se puede hacer" para solucionar el problema, toda vez que ha señalado que desde que se realizaron los trabajos de emergencia, que incluían la limpieza y apertura del aliviadero izquierdo "ya desagua bien y no hay la presión que había" porque "estaba obstruido y no tenía salida". Asimismo, ha indicado que el nivel del agua "ahora mismo se encuentra por debajo de la cota de seguridad".
Vázquez ha remarcado que se ha encargado un estudio de inundabilidad con la finalidad de dar solución al otro aliviadero de forma que, una vez conocidas las conclusiones y el presupuesto para llevar a cabo las reparaciones necesarias, proceder a la soluciones. Asimismo, admite que el Ayuntamiento podría ayudar económicamente, pero necesitaría de las demás administraciones para realizar las obras necesarias y ha lamentado que "consideren que es más fácil dejarlo fuera de servicio que tratar de arreglarlo".
En este contexto, desde Giahsa señalan que el arreglo del dique Monte Félix-Toril no es viable, a nivel económico "por sus costes de actuación sobre él, adaptación y mantenimiento, que son muy caros", ni de recursos de agua porque "lamentablemente no tiene otro aprovechamiento", aunque entiende que a los vecinos "les dé pena".
Desde la Junta de Andalucía indicaron el pasado mes de junio que la "titularidad y la competencia" del pantano Monte Félix-Toril es "del Ayuntamiento y que Giahsa es la responsable de la concesión de abastecimiento", toda vez que apuntó que al ser organismo de cuenca, la Junta "puede tener responsabilidad subsidiaria, de forma que si el Ayuntamiento no actúa la administración andaluza podría actuar y luego pasar la factura al Ayuntamiento".
GRIETA Y DESALOJOS
El pasado 20 de enero la Junta de Andalucía tuvo que activar el Plan de Emergencias ante el Riesgo de Inundaciones --con la llegada de la borrasca Garoé-- por el agrietamiento de la infraestructura. El mismo fue desactivado el 25 de enero, una vez superado la situación de riesgo detectada.
Durante más de tres días, el Servicio de Emergencias desplegó más de medio centenar de efectivos que trabajaron para aliviar la presión sobre el muro y salvaguardar la seguridad de los vecinos de la zona.
Desde la Agencia de Emergencias de Andalucía (EMA) se plantearon distintas actuaciones como ampliación de aliviaderos y recuperación de la antigua válvula de fondo para sacar hasta tres puntos de agua, al tiempo que se movilizaron de forma urgente hasta once bombas de extracción de alta capacidad que llegaron a evacuar del embalse más de dos millones de litros de agua a la hora.
En este aspecto, 112 indicó que para esta operación se contó con efectivos de Protección Civil; Infoca; Grea; el Centro de Emergencias Sanitarias (CES 061) con médico, enfermero y técnico de Emergencias y un vehículo de apoyo logístico con capacidad para atender a 50 personas; Policía Local y Guardia Civil; Unidad de Policía Nacional adscrita a la comunidad autónoma, personal de Ghiasa y de la Mina Matsa, esta última cuya colaboración fue "esencial" en la disponibilidad de recursos.
Dicho plan estuvo capitaneado por la dirección de la Agencia de Emergencias de Andalucía encabezada por su director gerente, David Gil, el director de Emergencias, Alejandro García, y el subdirector de Emergencias, Juan Ramón Rodríguez.
Todos ellos controlaron las actuaciones desde el Puesto de Mando Avanzado donde se coordinaron los efectivos y en el que participaron todas las administraciones, con el servicio autonómico y provincial de Protección Civil y el equipo de Expertos de la Dirección General de Infraestructuras del Agua, cuyo director Álvaro Real también estuvo asesorando.