Málaga.- Tribunales.- Abonan casi 368.000 euros a lesionados o familiares de fallecidos en el accidente del autobús

Actualizado: domingo, 16 noviembre 2008 14:35

Un informe estima en 152 kilómetros por hora la velocidad del todoterreno en el momento del siniestro

MÁLAGA, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Juzgado de Instrucción número 1 de Torremolinos (Málaga) ha acordado abonar un total de 367.708 euros a varios lesionados y familiares de fallecidos en el accidente del autobús ocurrido el pasado 19 de abril en la localidad malagueña de Torremolinos, en el que murieron nueve personas de nacionalidad finlandesa y otras 42 personas resultaron heridas.

Según la providencia del juzgado, a la que tuvo acceso Europa Press, se ordena pagar 43.079 euros a uno de los perjudicados por el fallecimiento de un pasajero, 14.359 euros a otra persona también por la muerte del mismo ocupante y la misma cantidad a un tercer perjudicado por este fallecimiento.

Además, se acuerda el abono de 17.058 euros para una lesionada, el pago de 243.715 euros para otra persona que también resultó herida, así como 20.603 euros y 14.532 euros para otros dos lesionados. Estos pagos se acuerdan tras analizar el contenido de los escritos presentados a finales del pasado mes de octubre por la aseguradora del todoterreno al que se le imputa el accidente.

La compañía consignó judicialmente el pasado mes de junio la cantidad de 1,4 millones de euros, suma que, según la resolución dictada en su momento por la jueza, se iba a poner a disposición de los perjudicados mediante comisión rogatoria en el caso de los finlandeses.

De esa consignación, 24.831 euros fueron para el conductor del autobús accidentado, representado por el letrado Manuel Temboury; mientras que 8.538 euros eran para el ocupante del vehículo asegurado por la compañía, según el escrito que presentó la representación legal de la aseguradora.

INFORME

El siniestro se produjo a las 19.30 horas en la AP-7 en sentido Málaga y se vieron implicados el autobús y un vehículo, conducido por Jesús G.R., imputado en la causa y que dio positivo en las pruebas de alcoholemia. Además, según los testigos circulaba a una velocidad excesiva para las condiciones de la vía, en la que como máximo se podía ir a 120 kilómetros.

En este sentido, los primeros informes de la Guardia Civil indicaron que la velocidad del todoterreno era de 155 kilómetros por hora, aunque un nuevo estudio, realizado por el Instituto Universitario de Investigación del Automóvil para el Dirección General de Tráfico (DGT), y al que tuvo acceso Europa Press, estima la velocidad de colisión en 152 kilómetros por hora.

En este estudio, en el que se describe y se da información del escenario del accidente, además de hacerse una reconstrucción del siniestro, se precisa, asimismo, que en el momento de producirse "se encontraba lloviznando, con cielos parcialmente cubiertos de nubes", hecho que "a la hora de ocurrencia del siniestro provoca unas condiciones de iluminación parcialmente disminuidas".

Se indica que el accidente se originó "previsiblemente por la pérdida de control del conductor" del todoterreno antes de chocar con el autobús y apunta a que "previa a la colisión entre ambos vehículos, destaca la colisión del turismo con el guardarraíl del lado izquierdo de la calzada habilitada para su sentido de marcha, aunque no está claro que fuera uno de los desencadenantes del accidente".

En este sentido, en las conclusiones del informe, aportado al procedimiento judicial, se precisa que "la ausencia de huellas sobre la calzada del turismo durante la fase de precolisión impide realizar hipótesis sobre las maniobras de dicho turismo en esa fase". Para el autobús, la velocidad estimada en el momento del siniestro es de 95 kilómetros por horas.

El conductor del todoterreno ingresó en prisión imputado por 52 delitos, como son conducción temeraria, conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas, nueve delitos de imprudencia grave con resultado de muerte y 41 delitos de lesiones por imprudencia grave. Posteriormente, la Audiencia de Málaga fijó una fianza de 18.000 euros, por lo que quedó en libertad.