MÁLAGA, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
Representantes de federaciones de asociaciones de vecinos de Málaga se mostraron hoy "preocupados" tras la suspensión ayer por parte de la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Andalucía (Cotua) de la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la capital y su devolución al Ayuntamiento, ya que temen que, "se pierda mucho tiempo y sí que acabe habiendo retrasos", lo que, "al final, perjudicaría a la ciudad y a los ciudadanos".
Así lo expresaron a Europa Press los representantes vecinales pese a que tanto el consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Espadas, como el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, aseguraron ayer que esta suspensión no tiene que suponer un retraso en la aprobación definitiva.
El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos 'Unidad', Ramón Carlos Morales, lamentó que el alcalde "haya estado jugando con fuego desde la aprobación inicial del Plan y no haya querido hacer caso ni a las alegaciones ni a los informes sectoriales que son vinculantes", e hizo hincapié en que "mientras antes se apruebe el PGOU, mejor para los malagueños, pero siempre según unos parámetros y unas normas".
El objetivo del equipo de gobierno del PP con el nuevo PGOU es "activar convenios urbanísticos", según Morales, quien se refirió a actuaciones como la prevista en Arraijanal, en cuyo uso están en desacuerdo el Consistorio y el Gobierno andaluz.
De hecho, temió que el hecho de que el Ayuntamiento siga insistiendo en esas cuestiones, contemplando, incluso, la posibilidad de recurrir a los tribunales, "pueda suponer perder mucho más tiempo". Por todo ello, criticó que "el alcalde piense que le beneficia electoralmente enfrentarse con la Junta".
PONER LÍMITES
Para el representante vecinal, en el PGOU elaborado por el Ayuntamiento de Málaga "hay mucho conservadurismo y poco respeto a la naturaleza y a criterios de sostenibilidad" y "la Junta tiene la obligación de poner unos límites cuando es necesario".
También desde 'Solidaridad' fueron críticos con el Ayuntamiento de Málaga. Así, su secretario, Óscar López, expuso que De la Torre "pretende sacar rédito político del enfrentamiento con la Junta de Andalucía".
En su opinión, la Administración local "vela sólo por el interés especulativo, el que beneficia únicamente a unos pocos". Además, tal y como declaró, "el Ayuntamiento tiene que ajustarse a las normas urbanísticas de mayor rango".
Por último, desde 'Cívilis', su presidente, Antonio Fuentes, indicó que "es el cuento de nunca acabar cuando se trata de administraciones de distinto signo político", lo que "siempre perjudica a los ciudadanos".
Fuentes, que sí teme que, al final, "haya un retraso en la entrada en vigor del nuevo PGOU", manifestó que "en vez de subsanar ahora esas deficiencias, se tendría que haber consensuado todo al mismo tiempo que se redactaba el Plan".
La Cotua, reunida ayer, determinó que el documento redactado y presentado por el Ayuntamiento "incurre en errores, defectos e incumplimientos a distintos informes vinculantes y normas que impiden su aprobación por parte de los órganos competentes de la Junta de Andalucía".
Entre las "deficiencias" detectadas en el proyecto, la Cotua advirtió de que el Ayuntamiento de Málaga "no ha cumplido su obligación de adaptar su planeamiento urbanístico a las numerosas correcciones a las que estaba obligado en virtud del contenido de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), de naturaleza vinculante".
Asimismo, se señaló que el documento tampoco atiende a los dictámenes y recomendaciones incluidos en los preceptivos informes sectoriales, entre otros el de Aviación Civil, también vinculantes, ni a las especificaciones del Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Málaga (Potaum).
