CÓRDOBA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Penal número 2 de Córdoba ha dictado una sentencia por la que absuelve a un hombre, de nacionalidad paquistaní, que estaba acusado por un delito contra los derechos de los trabajadores, tras supuestamente explotar a dos empleados, también de nacionalidad paquistaní, en un local de la capital cordobesa. El juez señala que ante la "escasa prueba, por no decir nula, la solución debe ser absolutoria".
Según recoge la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el procesado es propietario de un establecimiento situado en la carretera de Castro del Río, en el que el día 29 de noviembre de 2013 se personaron los agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras y subinspectores de Trabajo.
En ese momento, se encontraban en el local los dos citados empleados, que "carecían de permiso de residencia y de trabajo", al tiempo que "eventualmente ayudaban al acusado, que los tenía acogidos en su vivienda", según detalla el magistrado en la resolución.
Al respecto, el juez considera que los hechos "no se estiman legalmente constitutivos del delito contra los derechos de los trabajadores", puesto que "ni siquiera consta la contratación ilegal" de los empleados, que "niegan trabajar en el establecimiento en condiciones que les perjudiquen", al tiempo que "reconocen que están acogidos por su familiar" y que "en ocasiones acuden al local".
Además, apunta que "en todo caso, la prueba que hace referencia a lo contrario es absolutamente débil", a lo que añade que "los seguimientos policiales no llegan a identificar a ninguno de los presuntos trabajadores". También, subraya que "no se han acreditado ni existe la menor prueba de las condiciones laborales, salario, jornada laboral y demás circunstancias mínimas para definir el delito".
Cabe destacar que la Fiscalía había solicitado una pena de tres años y seis meses de cárcel y una multa de 1.440 euros para el hombre, igual petición que hizo la acusación particular, que ejercía la Tesorería General de la Seguridad Social. Mientras, la defensa, representada por el letrado José Ángel Martínez, pidió la absolución, que en este caso ha dictaminado el juez.
