La analítica muestra que el Guadalquivir no resultó contaminado tras el vertido de aguas residuales en Villargordo

Europa Press Andalucía
Actualizado: miércoles, 4 marzo 2009 13:45

JAÉN 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

El delegado de Medio Ambiente de la Junta en Jaén, José Castro, destacó hoy que la analítica sobre una posible contaminación del río Guadalquivir tras el vertido de aguas residuales ocurrido el pasado día 17 de febrero en una cooperativa de Villargordo es negativa.

A preguntas de los periodistas, Castro explicó que el río "no tiene ningún problema", un resultado que era "previsible" por el poco caudal emitido tras el incidente así como por el gran volumen de agua que en esta época lleva el Guadalquivir.

De esta manera, según añadió, queda por conocer los resultados de la analítica realizada en el arroyo Chorreadero, que desemboca en el Guadalquivir y a través del cual llegaron las aguas residuales a él, algo que previó para finales de esta semana.

La Junta de Andalucía abrió un expediente a la cooperativa Cristo de la Salud de Villargordo, uno de las poblaciones que forman el municipio de Villatorres, con el objetivo "estudiar el caso" y recabar toda la información necesaria para aclarar qué fue lo que sucedió y tomar las determinaciones que correspondan.

El vertido tuvo lugar el 17 de febrero cuando se produjo una fisura en el suelo de un depósito de aguas residuales de la almazara. Técnicos de Medio Ambiente y de la Agencia Andaluza del Agua trabajaron en lugar para recoger muestra y realizar una analítica.

En cualquier caso, el gerente de la cooperativa Cristo de la Salud, Juan Antonio Martos, aseguró entonces que el impacto del vertido era "mínimo" y cifró en unos 400 metros cúbicos los que llegaron al río Guadalquivir a través del arroyo Chorreadero.

Martos indicó que el depósito tiene una capacidad de "tres millones de litros, si bien en el momento del incidente contenía 1.500 metros cúbicos, de los que al cauce público han podido llegar unos 400 metros cúbicos". Esto fue posible, según precisó, porque unos 1.000 metros cúbicos se pudieron recoger en la propia cooperativa, ya que cayeron a dos grandes albercas desde los que fueron bombeados a otros depósitos y, además, otra parte del vertido también pudo ser desviada a unos terrenos contiguos a las instalaciones de la almazara.

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