BAEZA (JAÉN), 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
El antropólogo Aniceto Delgado, que participa en el ciclo de ponencias 'Patrimonio intangible: aromas, olores y sabores' de los cursos de verano que la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) imparte en Baeza (Jaén), aseguró este lunes que aún queda por conocer gran parte del patrimonio inmaterial de Andalucía.
En una entrevista concedida a Europa Press, Delgado, que actualmente desarrolla su labor en el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, indicó que, desde el punto de vista de la protección institucional, ese tipo de legado "significa muy poco a día de hoy", si se compara con el patrimonio tangible, fundamentalmente los monumentos.
"Pretendemos cubrir ese vacío --explicó el ponente-- con la elaboración de una lista, centrada en cuatro ámbitos fundamentales: rituales festivos, artesanías, tradición oral y modos de expresión significativos, y alimentación". Sus propuestas llegan a la Dirección General de Bienes Culturales de la administración autonómica, que se encarga de catalogar los bienes. "Normalmente se tienen en cuenta que sean elementos del patrimonio que guarden una tradición histórica y que además sean señas de identidad palpables a día de hoy", matizó Delgado.
También se establecen estrategias que permitan la continuidad de este patrimonio definido por la Unesco en 2003, en relación a los marcos actuales, pero no bajo un concepto inalterable: "Cuando se habla de tradición, se confunde con algo inmutable. Es todo lo contrario. Si algo caracteriza a la tradición es que es viva, es dinámica. Que antes en una romería fueran montados en burros y ahora vayan en tractores no significa que deje de ser tradicional", detalló Delgado.
"Buscamos que la población conozca y valore su patrimonio", indicó el ponente, quien prepara en la actualidad la documentación técnica para la declaración de Bien de Interés Cultural de los fandangos de la provincia de Huelva. En el Instituto, dedicado a la investigación, "no tenemos potestad para decidir qué patrimonio proteger, pero sí podemos documentar la diversidad de Andalucía en este sentido".
Y los resultados parecen óptimos: "Por ejemplo, en los años 60, la mayoría de las danzas rituales existentes en la región estaban a punto de desaparecer. Algunas de ellas incluso eran seguidas sólo por los niños, porque ya los mayores las veían como algo arcaico, contrario a la modernidad, que no iba con los tiempos. Pues ahora, a la altura de 2010, no sólo se han recuperado las danzas, sino que también se han creado nuevas". Ello ha ocurrido porque "la propia población se está dando cuenta de que son señas de identidad suyas y no quieren renunciar a ellas", argumentó.
Delgado reconoció que existe una mayor concienciación social hacia el patrimonio inmaterial, pues "es cercano, se vive en el día a día". Un legado para cuya protección es fundamental el apoyo social: "Es parte indisociable. Si las poblaciones no se implican en el desarrollo de la actividad, el patrimonio desaparece".
En el curso, que comenzó este lunes y continuará hasta el viernes, intervendrán diferentes antropólogos, historiadores, restauradores y economistas, además de la escritora Laura Esquivel, que impartirá la conferencia "Sabor a Andalucía".
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