Asociación ecologista de Hornachuelos rechaza la ampliación de El Cabril y pide un referéndum sobre el asunto

Actualizado: martes, 28 enero 2014 22:09

HORNACHUELOS (CÓRDOBA), 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Ecologista de Hornachuelos, 'Hornasol', ha expresado su rechazo e "indignación" ante la "grave amenaza medioambiental" que supondría la ampliación de la capacidad del cementerio nuclear de El Cabril, situado en el término municipal de Hornachuelos, y solicita la celebración de un referéndum sobre este asunto.

En un comunicado, la Asociación ha señalado que Enresa "supuestamente no dice la verdad al afirmar que duplicar el volumen no originaría un aumento de actividad radiactiva". "Hornachuelos desde que se construye El Cabril en 1992 no ha dejado de bajar en población, subir en desempleo, emigración juvenil, subir en impuestos locales y elevar la emigración, aún cuando se prometieron centenares de empleos y un libro blanco de desarrollo que nunca se aplicó", ha lamentado.

En este sentido, ha subrayado que las expectativas creadas de empleo y de desarrollo económico en las comarcas de la Vega del Guadalquivir y Valle del Guadiato han visto decrecer su desarrollo económico, agrario y empresarial desde 1992 por el impacto negativo de la actividad nuclear de El Cabril.

Por otro lado, ha solicitado la convocatoria próxima, coincidiendo con la consulta para las elecciones europeas, de un referéndum en Hornachuelos sobre El Cabril, para que los vecinos se expresen libremente sobre este asunto pues los gobernantes locales actúan "de espaldas a su pueblo".

A su juicio, es "inadmisible" que esta instalación nuclear, situada al borde del Parque Natural de Hornachuelos, Reserva de la Biosfera, que se "pueda siquiera estudiarse su ampliación al doble de El Cabril actual".

Por todo ello, insta a las autoridades municipales, comarcales, provinciales, Diputación de Córdoba, Diputación de Sevilla, Diputación de Badajoz, Junta de andalucía, Junta de Extremadura, Gobierno de la Nación, Consejo de Seguridad Nuclear y Unión Europea a que "frenen y paralicen" desde ya este "despropósito medioambiental que atenta contra la calidad de vida de los cordobeses y andaluces".

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