CADIZ, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
El sindicato CSI-CSIF de Cádiz ha exigido hoy el cese de la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, por "sumar un cúmulo de errores y despropósitos", el último de los cuales consideran que son las declaraciones de la responsable de la prisión de Botafuegos, en Algeciras (Cádiz), Isabel Martínez, sobre los presos de ETA.
En un comunicado remitido a Europa Press, CSI-CSIF recordó que una de las primeras medidas que adoptó Gallizo cuando tomó posesión de su cargo fue la destitución de "numerosos" directores de prisiones que hasta el momento "habían demostrado sobradamente su valía, profesionalidad y buen hacer", mientras que la actual responsable de Botafuegos "pone como ejemplo de conducta" a unos presos considerados por Instituciones Penitenciarias como "de los más peligrosos".
Así, aseguraron que, aunque "estamos lamentablemente" acostumbrados a que tanto presos como familiares de los mismos "nos insulten, nunca nos podíamos imaginar estas afirmaciones por parte de una de nuestros directores de centros penitenciarios".
En este sentido, la nota recuerda que es "moneda común" que los funcionarios sufran "agresiones, vejaciones, robos y amenazas" por parte de los internos, mientras que la política actual de la Dirección General "no garantiza la intimidad, salud, seguridad y, mucho menos, la reinserción social" de los penados.
Mientras que los miembros de ETA "y pocos internos más gozan de una celda individual", terroristas islámicos, narcotraficantes, violadores y atracadores "conviven" con internos pendientes de juicio, siendo así las prisiones "que Gallizo dirige universidades de la delincuencia".
Por último, el sindicato criticó que mientras la directora de Instituciones Penitenciarias no cesa a Isabel Martínez, "ha castigado a un funcionario de prisiones, víctima de los etarras, quitándole el complemento de productividad".
En este sentido, relató que un trabajador y afiliado a CSI-CSIF se encuentra de baja psiquiátrica tras ser amenazado por internos de la banda y descubrir pintadas en su casa "que rezaban 'ETA mátalo' y otras amenazantes en euskera", una situación "a la que Instituciones Penitenciarias ha respondido quitándole el complemento económico de productividad".
