CÓRDOBA 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Caja Rural de Córdoba, Manuel Enríquez, informó hoy de que la entidad se va a adherir a un Sistema Institucional de Protección (SIP) junto a otra veintena más de cajas como un mecanismo de apoyo y defensa mutua entre entidades de ahorro rurales que permitirá que se puedan proteger una a otras manteniendo altos estándares de solvencia y liquidez.
En rueda de prensa, Enríquez explicó que históricamente nunca ha sido un objetivo prioritario para la caja fusionarse, por lo que han optado por esta medida, ya que supone que las entidades integrantes "mantendrán su forma jurídica y su capacidad de decisión, así como su independencia económica".
Comentó que están en pleno proceso de integración y se trata de un compromiso entre socios para que todos queden cubiertos ante cualquier eventualidad. Subrayó que este SIP debe estar definido a finales de año y a él estarán vinculadas más de 20 cajas.
Por otro lado, y sobre su índice de morosidad, informó de que hasta el 31 de mayo de este año Caja Rural de Córdoba estaba en torno al 2,6 por ciento y las coberturas en el 152 por ciento. Según su presidente, "son datos que la ponen en una situación de privilegio", por lo que espera que la evolución siga así y que se pueda cumplimentar el año con estos o similares datos.
En comparación, Enríquez recordó que a finales de mayo el índice de morosidad global del sistema financiero en España estaba en el 4,26 y la media de morosidad de las cajas rurales estaban en el 3,77. De este modo, dijo que "son datos alentadores que permite ver el panorama con un cierto optimismo".
En asamblea general ordinaria, la caja aprobó hoy los resultados del ejercicio pasado, que cerró 2008 con un indicie de morosidad del 1,6 por ciento del total de su cartera crediticia, lo que sitúa a la entidad en muy buena posición con respecto al resto de cajas de ahorros, en las que la media de este indicador se situó en el 3,7 por ciento en el mismo periodo.
Además, logró una ratio de cobertura de la morosidad del 228,7 por ciento, mientras que la cobertura media del sector estaba en el 60 por ciento al concluir 2008. Los responsables de la caja también resaltaron el volumen de la actividad crediticia de esta entidad financiera, que ha superado en el ejercicio de 2008 la cifra de 1.000 millones de euros.
Por otra parte, el beneficio de Caja Rural de Córdoba en 2008 fue superior a los seis millones de euros, lo que supone un incremento del siete por ciento con respecto al balance del año anterior. Otro dato significativo es la evolución de los recursos propios, que alcanzaron un ratio del 10,34 por ciento, un indicador que supera los 9,62 del año anterior. Así, el crédito a los clientes se incrementó un cuatro por ciento y los depósitos subieron un tres por ciento.
De este modo, el presidente aseguró que luchan día a día por mantener los beneficios obtenidos en 2008 y ojalá puedan cerrar 2009 con similares resultados. Informó además de que la fundación de la Caja Rural está en marcha y para principios de otoño estará funcionando. Ya tiene aprobados sus estatutos y el gerente, que será Enrique Aguilar, ya está contratado.
Por otro lado, sobre el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), al que el Consejo de Ministros dio hoy luz verde, Enríquez manifestó que "son medidas que hay que tomar porque son necesarias" y cree que la banca tiene que reestructurarse. Desde su punto de vista, no hay más remedio que adecuarse porque "el modelo ha cambiado, hay que aceptarlo y hay que ir por otras vías".