La Consejería de Cultura recupera el cromatismo original del Cristo de la Buena Muerte

Actualizado: miércoles, 18 marzo 2009 19:44

JAÉN, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Rosa Torres, presentó hoy la restauración de la talla del Cristo de la Buena Muerte, propiedad de la hermandad del mismo nombre con sede en la Catedral de Jaén. El tratamiento se ha llevado a cabo en el Taller de Escultura del Centro de Intervención del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), una actuación que ha permitido recuperar el cromatismo original de la imagen y consolidar la sujeción de su soporte.

La pieza, obra del escultor Jacinto Higueras, está fechada en 1927 y representa a Jesús Crucificado tras haber sido condenado por Pilatos y azotado y maltratado por los soldados romanos. La imagen es morfológicamente una obra de bulto redondo, realizada en madera tallada y policromada.

Torres afirmó que este Crucificado de la Buena Muerte es una de las imágenes destacadas de las procesiones de Semana Santa en la capital jiennense. La intervención sobre esta escultura es, según la consejera, "el último ejemplo de la labor continuada que la Junta desarrolla, desde hace años y a lo largo y ancho de nuestra geografía, para preservar y restaurar los elementos de un patrimonio artístico en el que culto y cultura se dan la mano", según informa la Junta de Andalucía.

Las alteraciones principales que presentaba la imagen eran daños tanto en el soporte como en la policromía, causados por el envejecimiento propio de los materiales y por su uso como imagen de culto y procesión. Antes de acometer la restauración y como es habitual en el IAPH, se realizó una investigación interdisciplinar sobre la obra.

Posteriormente, el tratamiento de la pieza consistió en una intervención integral que ha dotado al soporte de una consolidación óptima y que ha devuelto a la imagen su cromatismo original y la impronta e intencionalidad estética de esta obra religiosa de peso en la Semana Santa de Jaén.

Una de las últimas fases del proceso fue la colocación de un nuevo sistema de sujeción de la imagen a la cruz, en acero inoxidable. Esta fijación se ha reforzado con un sistema de anclaje de manos y pies, que permite tanto el movimiento natural del soporte como las vibraciones de la imagen al ser procesionada.

La consejera de Cultura recordó asimismo que durante el pasado 2008 fueron restaurados también en el IAPH doce pinturas al óleo sobre lienzo del Camarín de Jesús Nazareno, anexo a la Iglesia de San José, que muy pronto regresarán al templo ya que las obras del mismo están en su recta final.