Córdoba.-El Ayuntamiento pide a la CHG la autorización para la instalación del Hombre-Río cerca del puente de Miraflores

Actualizado: viernes, 20 octubre 2006 15:58

CORDOBA, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del gobierno municipal de Córdoba, Andrés Ocaña (IU), informó hoy de que el Ayuntamiento ha remitido a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) el proyecto y la solicitud de autorización para la instalación del Hombre-Río en el cauce del Guadalquivir a su paso por Córdoba, cerca del puente de Miraflores.

En rueda de prensa, Ocaña informó de que tanto el proyecto técnico como la adjudicación están hechas, a la espera sólo de que empiece a ejecutarse, una vez que también se ha realizado la evaluación del mismo. El acuerdo entre los escultores y la Gerencia de Urbanismo se firmó ayer y la obra contará con un presupuesto de 48.000 euros, con un plazo de ejecución de dos meses, por lo que se espera que esté instalado a mediados de diciembre.

La escultura supone una réplica exacta de la que apareció el pasado día 18 de abril flotando en el río y que volverá a ser colocada en las proximidades del puente de Miraflores, donde permanecerá flotando como elemento ornamental.

En esta ocasión, el 'Hombre-Río' será de poliéster, un material más duradero que el corcho blanco con el que se realizó la originaria y se pondrán los anclajes necesarios para evitar su desplazamiento. Sin embargo, las dimensiones sí serán las mismas, por lo que la escultura tendrá 1,80 metros de alto, 2,50 de ancho y cinco metros de largo.

Los autores de la obra, Rafael Cornejo y Francisco Marcos, trasladaron sobre las 2.00 horas del pasado 18 de abril en un coche, desde una nave de un polígono industrial de Córdoba, la escultura dividida en tres piezas, a la orilla del río.

Sobre una balsa de fabricación casera la transportaron hasta el centro del río y la engancharon a los anclajes que el día anterior habían instalado. En la operación, uno de sus cuatro colaboradores, cayó al río, por lo que no pudo fijarse el último anclaje. Por este motivo es por el que la estatua podía girar 180 grados, aunque la intención era que mirara siempre al casco histórico de la ciudad.

La escultura, representa a un hombre tumbado en el lecho del río, y, según afirmaron los autores, fue una "aportación personal" de los artistas a la candidatura de Córdoba a Capitalidad Cultural de Europa en 2016.