CÓRDOBA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Plataforma Ciudadana Anti-incineradora, que se opone a la quema de neumáticos usados y otros residuos, como parte del proceso productivo de la cementera del Grupo Cosmos en Córdoba, afirmó hoy que pedirá un compromiso del Ayuntamiento de la ciudad para que no conceda licencia de actividad, a pesar de que la empresa ya ha renunciado a ello.
El colectivo reaccionó así tras conocerse hoy que Cosmos no quemará finalmente residuos para la fabricación de cemento, pero no obstante la posición de la plataforma es de "mucho escepticismo" porque, según explicó en un comunicado su portavoz, Juan Escribano, la Autorización Ambiental Integrada, obtenida por parte de la Consejería de Medio Ambiente, dura ocho años, por lo que durante ese tiempo se puede usar esa concesión.
Escribano subrayó que la empresa ha dicho solamente no va a usar esa autorización, pero no renuncia a ello, por lo que afirmó que tendrán que estar pendientes durante todo ese tiempo para ver si va a utilizar esa concesión.
Por tanto, la plataforma apuesta por introducir los mecanismos necesarios para asegurar que nunca la vaya a poder utilizar y en ese sentido pide a Cosmos "una declaración a la Junta de Andalucía para que la Administración autonómica deniegue, retrotraiga o deje de tener efectividad esa concesión".
También piden al Ayuntamiento que se comprometa en Pleno, por parte de todos los grupos municipales, a que nunca se va a conceder la licencia municipal de nueva actividad, que sería el requisito imprescindible. Para ello, van a solicitar que se incluya en el orden del día del Pleno esta cuestión. Además, continuarán recogiendo firmas contra el proyecto y el 2 de octubre determinarán nuevas movilizaciones a llevar a cabo.
Y es que para Escribano, la posición de Cosmos y algunos políticos locales "denota la barbaridad que se iba a hacer ahí y cómo el delegado de Medio Ambiente de la Junta, Luis Rey, había mantenido una actitud absolutamente desprovista de cualquier lógica y altamente peligrosa".
El portavoz asegura que si no se hubieran enterado en agosto de esta concesión y no hubieran llevado a cabo protestas, "el proyecto seguramente habría seguido hacia adelante y no hubiéramos sabido que eso existía hasta que el Ayuntamiento hubiera dado la licencia de actividad".
