Emasagra, la primera compañía de su sector en lograr la autosuficiencia energética en todas sus instalaciones

GRANADA 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

La alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, ha anunciado que Emasagra, la empresa mixta que presta el servicio municipal de abastecimiento y saneamiento en la ciudad y parte de su cinturón metropolitano, ha logrado uno de esos hitos calificado como extraordinario y se ha convertido en la primera compañía de su sector, la gestión del ciclo integral del agua, y del país, en lograr la autosuficiencia energética en todas sus instalaciones.

Una meta que la compañía empezó a vislumbrar hace una década y que este martes ha celebrado por todo lo alto con un acto en la Estación de Tratamiento de Potables (ETAP) de Lancha de Cenes, ante responsables locales --la empresa está participada por el Ayuntamiento de la capital e Hidralia--, representantes institucionales y los alcaldes y alcaldesas de los catorce municipios del área metropolitana donde Emasagra opera.

"Nos hemos convertido en un referente en sostenibilidad", ha manifestado la alcaldesa y presidenta de Emasagra, Marifrán Carazo, quien ha añadido que "se ha tenido un compromiso firme con la descarbonización, el impulso de energías renovables y la innovación tecnológica, lo que ha permitido no sólo reducir la huella de carbono, sino que contribuir a un modelo de economía circular que genere calidad de vida y un entorno de bienestar".

Al hilo, ha explicado que "en Granada llevamos años anticipándonos y proponiendo soluciones eficaces y sostenibles para mejorar tanto la gestión del ciclo integral del agua, como la calidad medioambiental del entorno y en definitiva la vida de las personas, de las que nos ocupamos prioritariamente, además de realizar grandes inversiones en la red de abastecimiento para evitar fugas y pérdidas de un bien tan preciado".

Además, la alcaldesa de la ciudad ha manifestado que "esta transformación sostenible de la empresa municipal de abastecimiento de agua es una muestra del camino propuesto por nuestra ciudad en un proyecto que es de todos, como es la candidatura de Granada a Capital Europea de la Cultura 2031, en esta ocasión con el agua como vector principal, ya que se desarrollarán nuevas soluciones que ayuden a hacer de la ciudad una urbe sostenible en el futuro manteniendo su fisonomía, su legado y su historia en conexión directa con el agua".

La clave del modelo de éxito de Emasagra ha estado en pasar del consumo de energía procedente de fuentes convencionales a producir energía fotovoltaica, hidráulica y cogeneración, han detallado desde el Ayuntamiento de Granada en una nota de prensa tras el acto.

En la última década, y gracias a esa transición energética que también ha servido para combatir los efectos del cambio climático, la empresa ha sido capaz de aumentar en un 60 por ciento su producción de renovables y, como había previsto, en este año 2025, ya es plenamente autosuficiente, como quedó de manifiesto en la gala de este martes, presentada por la meteoróloga e 'influencer' Mercedes Martín.

La gala fue adornada con números musicales mientras desde el escenario, con imágenes y palabras, diversos protagonistas del camino recorrido trazaron una línea del tiempo desde 1924, fecha en la que se declaró de utilidad pública el abastecimiento de agua en Granada, y con referencias y con algunas citas ineludibles, como al año 1933, en el que se levantó el primer depósito para almacenar el recurso natural procedente del río Genil, o el año 1938, en la que se inició la construcción de la planta potabilizadora.

De hecho, como broche de oro del evento de este martes, la alcaldesa entregó una placa conmemorativa a Belén Fernández, la hija del ingeniero Manuel Fernández Solsona, que diseñó la planta. Ella agradeció emocionada el detalle al recordar la labor de su padre. Ya en este siglo, fueron destacados, entre otros, los años 2001, en el que se instalaron dos motores en la estación depuradora de aguas residuales Sur para aprovechar el biogás.

La empresa se convierte en la primera compañía de su sector en el país que lo logra al ser capaz de aumentar en un 60 por ciento su producción de renovables en una década, llegando al "cien por cien en su autosuficiencia".