BAEZA (JAÉN), 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El catedrático de Derecho Mercantil por la Universidad de Jaén Ángel Martínez ha apuntado este lunes que la compra de un producto agroalimentario con certificado de calidad implica "cierta solidaridad de los consumidores respecto a los productores".
Así lo ha indicado en una entrevista con Europa Press tras la inauguración del curso de verano 'Certificación de la calidad y sus estrategias comerciales en el sector agroalimentario andaluz. Aportaciones de la nueva IGP Aceite de Jaén al sector oleícola español', que dirige esta semana en la sede Antonio Machado de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), en la localidad jiennense de Baeza.
En esta actividad, se estudian y analizan las figuras de calidad agroalimentaria desde sus diferentes perspectivas, como la jurídica o la económica. Para ello, la formación se impartirá hasta el próximo con la participación de ponentes expertos y profesionales en la materia.
Martínez ha explicado que los beneficios de esta etiqueta de calidad repercuten en ambas partes: técnicos operadores y consumidores. Los primeros tienen la posibilidad de ver aumentados sus beneficios, pues "al valorizar el producto pueden venderlo a un mayor precio porque es de mayor calidad".
Por su parte, para los consumidores este tipo de sellos supone una mayor garantía y seguridad. Además, el director del curso ha hablado de un "cierto desarrollo y sofisticación" por parte del cliente que lo invita a comprar estos alimentos por "algo más que la mera satisfacción, con el fin de dinamizar y premiar al territorio de donde proviene el producto".
Con respecto al proceso de entrega de certificados de calidad, ha manifestado que la dificultad radica en la acreditación de los requisitos que se solicitan. En este sentido, el catedrático ha puntualizado que estos parten de la "demostración de que existe un producto con un vínculo territorial, climático, geográfico, histórico, geológico... cuyas circunstancias lo han hecho proliferar".
En este sentido, ha valorado que Andalucía cuenta con numerosos alimentos que gozan de certificados de calidad. En concreto, ha aludido al aceite de oliva de Jaén, que ha conseguido recientemente el reconocimiento por parte de la UE de su Indicación Geográfica Protegida (IGP).
Ello, hasta el momento, "supone la primera y única IGP de aceite de oliva virgen extra en España". Asimismo, según ha añadido el experto, esta distinción permitirá "revalorizar y proteger todos los olivares de la provincia" jiennense.
