Granada.- El Ayuntamiento pide "depurar" responsabilidades ante la situación "bochornosa" del Circo del Arte

Actualizado: miércoles, 13 septiembre 2006 17:24

GRANADA, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -

El concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Granada, Juan García Montero, aseguró hoy que la auditoría de la Cámara de Cuentas sobre el Circo del Arte pone de manifiesto que la gestión de la escuela artística, desde el comienzo hasta el final, "ha sido un descontrol, un auténtico fiasco detrás de otro", por lo que pidió que, "ante este bochorno, se depuren responsabilidades penales y políticas".

En declaraciones a los periodistas, García Montero criticó que el PSOE "quiera lanzar una cortina de humo", así como que el presidente de la Diputación, Antonio Martínez Caler, opine sobre el asunto, cuando, según señaló, "es la persona menos indicada para hablar, ya que fue presidente del Consorcio y se marchó sin más".

Según relató, después de que el Ayuntamiento de Granada pasara a ser gobernado por el PP, el presidente de la Diputación "comenzó a reclamar de forma compulsiva la presidencia del Consorcio del Circo". Desde ese momento y hasta el 19 de enero de 2005, el Consistorio estuvo "en franca minoría dentro de la representación del Consorcio", según valoró el edil.

"Cuando Martínez Caler tuvo oportunidad de remendar la gestión nefasta que sus compañeros del PSOE en el Ayuntamiento de Granada realizaron se limitó a marear la perdiz y a mantener una situación que era insolvente", aseveró el concejal.

Sin embargo, en su opinión, desde que el alcalde de la ciudad, José Torres Hurtado, es presidente del consorcio, "técnicos municipales de Intervención, Tesorería y Contabilidad gestionan las cuentas del Circo y sin sus informes no se mueve ni un solo dedo".

García Montero también salió al paso de las declaraciones de Martínez Caler en las que manifestó que el Ayuntamiento está haciendo "un ridículo espantoso, al igual que ha hecho, bajo su punto de vista, con otros asuntos como el 'caso Alhambra", al asegurar que "el único ridículo lo ha hecho el PSOE al no saber cuántas personas entraban en un monumento que está protegido y que establece un número limitado de visitantes", algo que, según señaló, "en cualquier cine de barrio se hace con absoluta normalidad".