GRANADA 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Consultivo de Andalucía (CCA) ha dictaminado desfavorablemente la modificación del contrato de servicios de comedor en los centros docentes públicos de la provincia de Granada dependientes de la Consejería de Educación porque "no hay razón de interés público vinculadas a necesidades nuevas ni a causas imprevistas".
La Permanente del CCA, en su última reunión celebrada el pasado 3 de julio, consideró que lo ocurrido en la provincia --donde la Junta de Andalucía suspendió en enero el contrato de una empresa en una docena de centros donde ésta sirvió, al parecer, comida en mal estado-- se ha debido al "incumplimiento" de las obligaciones del contratista.
Según consta en la nota remitida a Europa Press, el CCA estima que la empresa que fue denunciada "prestó el servicio de comida de manera defectuosa en los comedores a los que se refiere el expediente".
Este fue remitido por la Consejería de Educación que solicitó dictamen sobre la propuesta de modificación del contrato de servicios de comedor en los centros docentes públicos por la "necesidad" de efectuar una "resolución parcial" del contrato.
Para ello, la Junta alegó incidencias en la prestación del servicio de comedor escolar por parte de la empresa adjudicataria que llegó a provocar una "situación de alarma y descontento" que, según Educación, "está afectando a la prestación del servicio y al interés público".
El pasado mes de enero la Junta acordó suprimir de "forma amistosa" el contrato con el catering Serunión --una empresa de implantación nacional perteneciente a una multinacional francesa-- después de que una docena de colegios e institutos públicos denunciaran en la Delegación Provincial de Educación el mal estado de la comida suministrada "de forma reiterada" por dicha empresa que, sin embargo, ha continuado prestando sus servicios a otros 33 centros granadinos.
La empresa, que continuó así trabajando con normalidad en el resto de centros en Granada, negó que existiera un solo caso de intoxicación, algo que sí ocurrió en dos colegios sevillanos en noviembre de 2006 donde resultaron intoxicados leves 86 escolares.