GRANADA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Granada, José Torres Hurtado, acusó hoy a la Junta de Andalucía de ser una administración "obstruccionista" después de conocer que la Delegación de Educación estudia la posibilidad de impedir legalmente el botellón del Día de la Cruz previsto por el Ayuntamiento de la capital en la Huerta del Rasillo por estar junto a centros educativos.
En declaraciones a los periodistas, Torres Hurtado ante esta postura de la Junta, pidió a la delegada de Educación, Carmen García Raya, que dé "una solución" al Ayuntamiento para abordar el botellón, ya que, según dijo, "es muy fácil impedir, prohibir y poner pegas y obstruir pero la sociedad nos pide soluciones".
"Si ella piensa que se puede molestar a los centros yo le puedo decir que la Universidad de Granada el día de la Fiesta de la primavera, lejos de colaborar con el Ayuntamiento, cerró las instalaciones educativas", manifestó el alcalde quien se preguntó "si estamos jugando a solucionar un problema o a ver si el Ayuntamiento tiene un problema".
Ante el próximo botellón anunciado para la Festividad de la Cruz, según sostuvo el primer edil, "el Ayuntamiento va a hacer lo que quieren los ciudadanos que es solucionar el problema de un botellón que no podemos controlar ni podemos impedirlo", intentando que se produzcan "las menores molestias posibles", por lo que solicitó a García Raya que "en vez de ser obstruccionista se ponga a ayudar porque además ella es la responsable de la educación de los jóvenes que son los que beben alcohol".
El alcalde manifestó en rueda de prensa que el Día de la Cruz es "una fiesta tradicional muy hermosa pero que en los últimos años por no haber tomado las medidas necesarias se había convertido en un gran macro botellón en toda la ciudad en el que se ensuciaba y sobre todo no se daba la imagen que deseamos de Granada".
Por ello, según explicó el alcalde este año el Ayuntamiento se dirigió a los propietarios del terreno de la Huerta del Rasillo solicitándoles el suelo para su uso los días 1, 2 y 3 de mayo para instalar allí un recinto para "el disfrute de la gente joven", y para lo cual se ha sacado a concurso un total de diez barras por si hay empresarios y asociaciones interesados en explotarlas.
Con esta medida el Ayuntamiento trata de "compatibilizar la tradición de las Cruces en las plazas y calles de Granada con la fiesta de los jóvenes", según dijo el alcalde, que espera contar con la colaboración de todas las administraciones "como se hizo en la Fiesta de la Primavera".
Así, afirmó que en los próximos días se celebrará la Junta Local de Seguridad "para tratar de organizar una fiesta tan emblemática de Granada" y señaló que el Ayuntamiento no autorizará botellones el fin de semana previo a esta festividad y que de todas formas "físicamente sería imposible" que los jóvenes se concentraran en el Rasillo puesto que "en esos días se estará trabajando en el acondicionamiento del terreno".
El primer edil manifestó que el dispositivo policial que se ponga en funcionamiento vigilará el entorno del Rasillo y también habrá patrullas en la ciudad que derivarán a los jóvenes que quieran hacer botellón en una zona de barra de Cruz hacia el Rasillo.
El alcalde pidió a los centros educativos cercanos a la zona tranquilidad ya que aseguró que "haremos todo lo posible ayudar a los colegios para que los alumnos puedan acudir a clase sin ningún problema" y recordó que "la máxima concentración de jóvenes se producirá por la tarde noche cuando no hay clases", por lo que tachó la alarma de "innecesaria".
Torres Hurtado manifestó que esta forma de abordar el problema es "la más pragmática, sensata y lógica" y recordó que la experiencia de la Fiesta de la Primavera fue "buena" y que "hay grupos políticos a los que les gustaría que las cosas salieran mal para así poder criticar", algo que calificó como "un error importante".
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