GRANADA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Granada ha condenado a ocho años de prisión a un hombre, J.R.M., que apuñaló a su compañera sentimental en 2004 en Baza (Granada) porque no quería volver con él, al considerarlo autor de un delito de homicidio en grado de tentativa, según la sentencia a la que tuvo acceso hoy Europa Press.
Asimismo, J.R.M. no podrá acercarse a 500 metros de su mujer e hijos comunes por periodo de cinco años. Además, tendrá que indemnizar al Servicio Andaluz de Salud en 1.438 euros y a la víctima en la cantidad que se determine tras finalizar el examen forense.
Los hechos considerados probados por el tribunal ocurrieron en junio de 2005 cuando la pareja, que se había separado temporalmente, viviendo cada uno en un municipios diferentes, tuvieron un encuentro en el que él pidió a ella quedarse a dormir en el domicilio que antes compartían, a lo que ella accedió. Esa noche, el acusado le pidió a su compañera que viviera con él en Darro, negándose de nuevo.
A la mañana siguiente, ambos llevaron juntos al hijo menor al colegio y después acudieron en compañía de una hija del acusado, fruto de una relación anterior, y la menor de ambos a la Comisaría de Policía para recoger el DNI.
Mientras esperaban en la cola, J.R.M. le pidió a ésta que guardara la cola y él fue a comprar un cuchillo a un establecimiento cercano. De vuelta de Comisaría, el acusado pidió a su compañera que la acompañara a la estación a despedirse y ella accedió.
En el trayecto, J.R.M. obligó a su compañera a introducirse en el porche de un edificio y sentada en un escalón le sacó la navaja y le dijo que no gritara que la iba a matar. Así, le lanzó una puñalada hacia el cuerpo que ella logró evitar afectándole ésta en el muslo izquierdo donde le atravesó la vena femoral.
La puñalada le provocó una gran hemorragia por lo que pidió auxilio a sus hijas, próximas al lugar de los hechos, e intentó alcanzar la calle más próxima en cuyo camino se desmayó.
Allí fue atendida por un auxiliar de farmacia y un forense que le practicaron sendos torniquetes para ser trasladada inmediatamente al Hospital de Baza donde fue operada.
Cuando intentaba huir el acusado, que está afectado de un trastorno disocial de la personalidad con bajo nivel intelectual y sociocultural y bajo control de los impulsos, fue detenido por la Guardia Civil.
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