GRANADA 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia provincial de Granada ha condenado a tres años de cárcel a un hombre, P.A.M. de 43 años, después de que se introdujera en la vivienda de otro individuo y tras apoderarse de las llaves de su vehículo le sustrajera el mismo, aparcado en la puerta, y huyera para lo que tuvo que conducir 500 metros con el propietario del mismo sobre el capó.
El tribunal lo consideró culpable de un delito de lesiones y otro de robo con violencia en las personas. Tendrá que indemnizar a la víctima en 14.665 euros, después de que ésta quedara impedida para el desarrollo de su ocupación habitual.
Se consideran hechos probados, según la sentencia a la que tuvo acceso hoy Europa Press, que el ahora condenado, P.A.M. saltó el 26 de octubre de 1996 la tapia de la vivienda de G.J.R.L. y cogió las llaves de de un vehículo del garaje para, acto seguido, hacer uso del vehículo temporalmente.
El dueño de éste, que se dio cuenta de la sustracción intentó evitarla echándose encima del capó del coche, pero el acusado emprendió la veloz huida y tras un recorrido de 500 metros con él sobre el capó, lo lanzó al suelo tras realizar un "brusco giro".
Cuando cayó, G.J.R.L. fue arrollado en su pierna izquierda por una de las ruedas posteriores del vehículo, lo que ocasionó la "fractura conminuta intracular del pilón tibial de la pierna izquierda para cuya curación precisó intervención quirúrgica y sanó a los 599 días, aunque las lesiones permanentes que sufre le incapacitan para su trabajo habitual.
El vehículo fue posteriormente abandonado por el acusado, que sustrajo del mismo una cartera, documentación, personal, herramientas, repuestos y efectos valorados en cerca de 60 euros, así como dinero y objetos que hizo suyos.