JAÉN, 28 May. (EUROPA PRESS) -
El imputado por la muerte de A.E.Q., de 41 años de edad y vecino de la capital, en los jardines del Hospital Médico-Quirúrgico de Jaén tras provocarle presuntamente Mohamed N. un fuerte impacto en la cabeza con una piedra en la madrugada del 11 de marzo del pasado año, ha manifestado este lunes, en el juicio con jurado que ha acogido la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén, que no se acercó a menos de dos metros al cadáver que yacía en el suelo.
En la vista, el acusado de los hechos, según la acusación particular ejercida por la familia de la víctima, ha declarado que vio el cuerpo de noche, en la oscuridad, cuando acudió al centro hospitalario para ser atendido por fiebre. En concreto, ha señalado que los restos de la víctima se encontraban en los jardines "cuesta abajo" y que se dio cuenta de que el fallecido era quien le había pedido un cigarrillo cuando le quitaron la piedra que tenía encima de la cabeza y con la que supuestamente lo mataron.
Asimismo, ha alegado en su defensa que, tras darse cuenta de lo acaecido, dio aviso de ello al personal sanitario del Médico Quirúrgico, si bien se trasladó hasta el lugar de los hechos guiado por el hoy imputado. Además, ha aseverado que no conocía a la víctima, a pesar de que le hubiese pedido un cigarro, y que en ningún momento la tocó, sino que más bien se asustó y decidió pedir auxilio para "salvarla".
De este modo, el jurado, compuesto por seis hombres y tres mujeres, ha escuchado a Mohamed N. decir que lleva en España desde el año 2000 y que antes de estar en paro era herrero soldador, si bien antes de vivir en Jaén en la indigencia --dormía en el hueco de las escaleras de un edificio de oficinas del Paseo de la Estación-- había estado en el municipio jiennense de Torredonjimeno, adonde afirma que le robaron su documentación identificativa.
En el transcurso de la primera sesión del juicio el abogado de la acusación ha querido que tanto el jurado como el acusado vieran un documento audiovisual captado por una de las cámaras de vigilancia del Hospital. Las imágenes registran, según ha trasladado el letrado a los periodistas, cómo el que podría ser el imputado cruza un paso de peatones "con total tranquilidad", por contra de lo que éste ha mencionado en su declaración, en la que ha aludido que fue "gritando en árabe asustado" hasta que llegó a la zona de urgencias del centro sanitario.
Al respecto, el acusado ha indicado que él, como el varón que aparece en las imágenes registradas, "va con mochila", aunque finalmente ha manifestado "no reconocerse".
BEBIÓ "UN TERCIO, MEDIA LITRONA Y CUBATAS"
Según han relatado varias personas que estuvieron con la víctima horas antes de los hechos, la misma había ingerido alcohol encontrándose en estado de embriaguez. En concreto, uno de los trabajadores de los salones de juego por los que al parecer pasó la tarde antes de morir ha asegurado que se bebió unos cuatro cubalibres, de igual forma que un compañero de fiesta ha corroborado que el fallecido "se había bebido una botella de un tercio de cerveza, media litrona y unos cuantos cubatas". Así, a partir de las 16,30 horas de este lunes declararán nuevos testigos en la segunda sesión del juicio.
Cabe recordar que tanto la Fiscalía como el abogado de la defensa piden la libre absolución de Mohamed N., toda vez que se carece de "pruebas que incriminen" al procesado, no existiendo, hasta el momento, autor conocido del referido delito. De hecho, el fiscal pidió en meses anteriores el sobreseimiento del caso por no tener pruebas suficientes que culpabilizaran a Mohamed N., de 36 años de edad. Sin embargo, la acusación particular lo acusa de asesinato y pide por ello un total de 25 años de prisión, así como una indemnización de 100.000 euros.
