Jaén.- Tribunales.- El acusado de pagar a dos marroquíes se muestra "arrepentido", "afectado" y "dolido"

Actualizado: lunes, 27 marzo 2006 14:04

JAEN, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

El hombre acusado de ofrecer 6.000 euros a dos marroquíes a cambio de que mataran a su esposa ya que ésta supuestamente le había sido infiel con otro hombre se mostró hoy "arrepentido", "afectado" y "dolido" por estos hechos.

En el juicio, que quedó hoy visto para sentencia en la sección primera de la Audiencia Provincial de Jaén, el acusado, José Angel G.R., manifestó que sigue viviendo con su mujer y que estaba bajo tratamiento psicológico cuando tuvieron lugar los hechos enjuiciados.

Así, el fiscal rebajó la pena de prisión que solicitaba para el acusado de tres años y nueve meses a dos años al considerar la atenuante de enajenación mental, ya que José Angel G.R. tenía las capacidades cognitivas mermadas, según expuso. Asimismo, también rebajó de cinco a tres años la prohibición de acercarse a la víctima. Por su parte, la defensa se adhirió a las conclusiones del Ministerio Fiscal.

La mujer, María del Carmen C., declaró en el juicio que ella desconocía que su marido hubiese pagado para que la mataran, si bien mostró su voluntad de continuar conviviendo con él, al tiempo que aseguró que José Angel G.R. "se ha arrepentido mucho".

Los hechos se remontan a finales de abril de 2005, cuando el acusado, vecino de Jaén y de 38 años de edad, contactó presuntamente en el Parque de la Victoria de Jaén con dos marroquíes a quienes les propuso un "trabajo" que consistía en "pinchar" a una mujer, aclarándoles que se trataba de matar a su esposa, "quitarle el bolso y arrojarla a un contenedor de basura para simular un robo".

Para ello, les facilitó datos de su esposa, como el lugar donde vivía, el recorrido que hacía para ir al trabajo y una fotografía de ella que tenía en su teléfono móvil. A cambio del trabajo, que habría justificado por una infidelidad de su mujer, el procesado les indicó supuestamente que les entregaría 6.000 euros.

En los días posteriores mantuvieron al menos dos contactos más en los que José Angel G.R. persistía en su proposición y les hizo entrega de 1.500 euros en cada ocasión para que llevaran a cabo el "trabajo", si bien finalmente no se realizó al comparecer uno de los marroquíes en la Comisaría de Jaén y denunciar los hechos.

El procesado, como consecuencia de las relaciones que su esposa le había confesado que había mantenido con otro hombre durante el periodo en que estuvieron separados, padecía de un episodio depresivo mayor del que estaba siendo tratado psicológicamente cuando ocurrió este suceso.