Jaén.- Tribunales.- Condenado a tres años por maltratar habitualmente a su mujer y a sus dos hijas

JAEN 16 May. (EUROPA PRESS) -

El titular del juzgado de lo penal número dos de Jaén ha impuesto una pena de tres años de prisión para un hombre que maltrató con carácter habitual a su mujer y a sus dos hijas.

La sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, establece como hechos probados que el condenado, José B.R., vecino de Santo Tomé (Jaén) y de 45 años de edad, le dijo el 1 de octubre de 2003 a su mujer, con la que llevaba casado 19 años, y a sus dos hijas que eran "unas putas zamarras", al tiempo que arrojó un cigarrillo encendido a su mujer y la amenazó con que si tenía que irse de la casa ellas también lo harían porque le pegaría fuego al domicilio.

Asimismo, establece que, en otra ocasión, José B.R., después de haber ingerido bebidas alcohólicas, llegó a su domicilio y le propinó una patada a su mujer, agresión ante la que una de sus hijas se interpuso entre ambos por lo que recibió un golpe en el labio. A continuación, el condenado tiró un cigarrillo encendido a su mujer y la acusó de ser una "sinvergüenza" y una "zamarra".

José B.R. cuenta en su haber con una condena por un delito de quebrantamiento de medida cautelar por acercarse a su mujer teniendo previamente un auto de alejamiento.

En el juicio, el condenado admitió haber tenido problemas con el consumo de alcohol y reconoció haber proferido insultos y amenazas tanto a su esposa como a sus hijas. Asimismo, aseguró que se había portado "muy mal" con ellas.

Por su parte, las víctimas tildaron de "frecuentes" los bofetones que les daba el condenado, sobre el que afirmaron que "solía llegar bebido" al casa y que "se portaba de una manera agresiva e insultante", si bien la mujer mostró su deseo de que "no le suceda nada a su marido".

Ante estos hechos, el magistrado condenó por un delito consumado de malos tratos habituales a José B.R. a la pena de un año y nueve meses de prisión y a otros 15 meses de prisión por dos delitos consumados de malos tratos en el ámbito familiar. Asimismo, le impuso el pago de una multa de 30 euros por una falta de amenazas.