Jaén.- Tribunales.- El dueño de un pub denunciado por los vecinos culpa al 'botellón' de los ruidos que achacan al local

JAEN 7 Mar. (EUROPA PRESS) -

Uno de los propietarios de un pub de Jaén que se enfrenta a una petición de cuatro años de prisión por la denuncia formulada por un grupo de vecinos del mismo inmueble culpó hoy al 'botellón' de los ruidos y emisiones acústicas que los denunciantes atribuyen a su establecimiento entre los años 2002 y 2004.

En el juicio, que quedó visto para sentencia en la sección tercera de la Audiencia Provincial de Jaén, uno de los dos acusados, Santiago M.R., aseguró que una de las veces que los vecinos le llamaron para exigirle que bajara el volumen de música de su local, éste ya estaba cerrado y sin ningún equipo de sonido en funcionamiento.

El acusado pudo comprobar ese día, según su declaración, que "a 20 metros" de distancia del edificio había una concentración de jóvenes de 'botellón', junto a la estación de Renfe, y que allí había coches con equipos de música puestos "a una barbaridad" de volumen. "No me extraña que los vecinos escucharan música", argumentó al respecto.

En cualquier caso, defendió que tanto él como el otro dueño imputado tuvieron siempre "voluntad de solucionar el problema" con los vecinos y que, tras la primera denuncia que éstos interpusieron, el local incorporó "a los pocos días" un limitador de sonido.

Además, indicó que las mediciones acústicas que se realizaron fueron favorables para el pub y que los técnicos "no encontraban razones lógicas para que hubiese fugas" de sonido. No obstante, se hicieron nuevas reformas y las cifras de la nueva medición resultaron incluso "un poquito mejores" que las anteriores.

El otro dueño del pub recalcó que, desde el principio, se contrató "a las mejores empresas" para que llevasen a cabo los requisitos que exigía el Ayuntamiento para la puesta en marcha del negocio y aseguró que "si alguna vez los vecinos nos han dicho que bajásemos la música, la hemos bajado", por lo que atribuyó todo este proceso a "una persecución absoluta hacia nosotros" por parte de esos vecinos.

La vecina más afectada por estos ruidos explicó que el ruido del pub les generaba "molestias terribles" y que la situación era "inaguantable", hasta el punto de "tener que cambiar los hábitos de vida", ya que era "como si tuviéramos la música en casa hasta las siete de la mañana". "Estábamos toda la noche sin dormir", apuntó esta mujer, que padecía ansiedad, insomnio y depresión.

El Ministerio Fiscal pide que se condene a los dos dueños del pub por un delito contra el medio ambiente a la pena de cuatro años de prisión, multa de 4.500 euros, inhabilitación especial para ejercer su profesión durante tres años y medio y una indemnización para la vecina más perjudicada.

El fiscal consideró que el Ayuntamiento de Jaén ordenó el precinto del aparato musical del local tras constatar que superaba el nivel de ruido permitido, lo que "molestaba" a los vecinos que tenían sus viviendas en los pisos superiores del edificio. A pesar de ello, se descubrió tiempo después que la música "seguía funcionando" a pesar de la orden municipal, según el Ministerio público.