GRANADA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los grupos municipales del PSOE e IU en el Ayuntamiento de Granada han reprochado al equipo de gobierno, del PP, "la falta de control" que mantiene sobre la empresa concesionaria del servicio de Ayuda a Domicilio, Clece, para garantizar una prestación de "calidad".
Las concejales Jemi Sánchez (PSOE) y Maite Molina (IU) han realizado estas declaraciones en una rueda de prensa en la que han comparecido junto al comité de empresa de Clece, que presta servicio a más de tres mil usuarios granadinos, con un coste superior a los cuatro millones de euros al año.
La edil del PSOE ha lamentado que los 600 trabajadores de la concesionaria "cada día tienen peores condiciones laborales" y ha censurado que el equipo de gobierno deje a una empresa privada gestionar un servicio público "sin ningún tipo de control, sin fiscalizar, sin mediar y sin exigir".
La edil ha reclamado además al Ayuntamiento y a la Junta que activen los expedientes paralizados para estos servicios y reabran las listas de espera, aunque según ha puntualizado, "la cruzada de Mariano Rajoy para acabar con el Estado de Bienestar, con recortes para la financiación de servicios, lo dificulta".
Por su parte, la concejal de IU Maite Molina ha incidido en que "el PP mantiene todavía una deuda millonaria con Clece, aunque esta empresa es claramente solvente y sigue teniendo beneficios".
Así, explicó que "los trabajadores sólo cobran entre 4 y 5 euros la hora y la empresa se queda por cada empleado con otros 4 o 5 euros, por lo que su margen de beneficios es absolutamente indecente". En este sentido, puntualiza que las horas por la prestación del servicio de Dependencia se pagan a 16 euros en el caso de la Junta y 14 en el caso del Ayuntamiento, "por lo que el PP no puede permitir que la empresa esté obligando a los trabajadores a firmar unas condiciones en las que pierden horas de trabajo y, por lo tanto, sueldo, pues hablamos de trabajadores que cobran entre 300 y 800 euros al mes".
Para la edil de IU, "no se puede consentir que a más de 300 trabajadores de los 647 que hoy prestan este servicio, y que son indefinidos, se les esté acosando para reducir su jornada laboral. Si no aceptan se les despide porque con la reforma laboral del PP las indemnizaciones les salen más baratas, con lo que además no se garantiza en absoluto la estabilidad laboral de los trabajadores fijos", ha relatado.
Por su parte, el portavoz del comité de empresa de Clece, Sergio Santander, ha denunciado "la duras condiciones laborales de los trabajadores de la empresa", afirmando que se producen problemas de organización que "están generando que la prestación del servicio no ofrezca plena garantía para los usuarios".
Santander explica que los servicios se distribuyen a través de mensajes de móvil a los empleados y no se les informa de la situación del usuario al que van a atender, por lo que considera que "lo único que interesa a la empresa es el beneficio económico".
