SEVILLA 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
Comerciantes de la zona centro de Sevilla, especialmente de calles como Córdoba, Lineros o Puente y Pellón, han pintado con graffitis las fachadas de sus establecimientos para evitar actos de vandalismo y robos ante la "falta de vigilancia policial" que acusa la zona, según informó la Federación Provincial de Comerciantes de Sevilla (Aprocom) a través de un comunicado remitido a Europa Press.
El colectivo criticó a la "Administración por desoír el clamor del comercio del centro cuando pide una mayor presencia policial" en la zona, reclamación que han vuelto a formular a raíz de dos robos perpetrados en un establecimiento de la calle Puente y Pellón nada más comenzar el año, siempre según Aprocom.
Ante tal situación, explicó Aprocom, los comerciantes "han decidido actuar por su cuenta ante la inoperancia policial para atajar esta oleada de robos. Para ello han reforzado los cierres de sus locales y ellos mismos los pintan con graffitis para evitar que rayen los cristales y los pinten de cualquier manera".
El presidente de Aprocom, José Cañete, dijo no entender "cómo los cuerpos policiales no han proyectado ya un dispositivo especial para detener a estas personas que tienen realmente alarmados y preocupados a un comercio de Puente y Pellón que se siente víctima de unos ladrones sin escrúpulos y de una Policía que no protege sus propiedades. Es realmente lamentable que desde que empezaran estas fiestas se hayan producido más de siete robos y aún no se haya detenido a ninguna persona". Por ello, se preguntó qué tienen que hacer los comerciantes y a quién tienen que acudir para que se les escuche.
Aprocom teme que mañana, dado que desfilará por la zona la Cabalgata de los Reyes Magos, pueda ser una "tarde-noche de película por los robos que se pueden producir en el centro, ya que una parte importante de los efectivos estará cubriendo el trayecto" del desfile. Por eso, el colectivo volvió a demandar "una mayor presencia policial en las calles del centro, una dotación que vigile y trate de coger 'in fraganti' a esa banda o a esas personas que tienen sumido al comercio de la zona en la mayor desesperación ante una Policía, que parece que les tiene en el más absoluto abandono y, por tanto, se sienten desprotegidos y con un alto grado de impotencia ante unos hechos que a todos se les van de las manos y nada pueden hacer, salvo reclamar ayuda policial".