Sucesos.-(Ampl.) La Policía desarticula una organización dedicada a la explotación sexual de chinas, con nueve detenidos

Actualizado: jueves, 22 junio 2006 13:34

La operación se ha llevado a cabo desde comienzos del año en Sevilla, Algeciras y San Roque (Cádiz), Huelva y Madrid

SEVILLA, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Unidad contra Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (Ucrif), grupo II, de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación del Cuerpo Nacional de Policía en Sevilla, en colaboración con la Ucrif de Algeciras (Cádiz) y la unidad central, con sede en Madrid, han desarticulado una organización criminal dedicada a la explotación de mujeres chinas. Se trata de la primera desarticulación de un grupo chino dedicado a la prostitución en Andalucía, no teniendo constancia además los responsables de la operación de que se haya llevado a cabo ninguna actuación similar del mismo nivel en España.

Según informó esta mañana en rueda de prensa el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, la operación, denominada 'Liaoning' y desarrollada en dos fases, se ha saldado con la detención de nueve personas --siete chinos y dos españoles--, la localización de 16 mujeres chinas en situación irregular, así como un varón, la intervención de cuentas bancarias, documentación, ordenadores, una vivienda y miles de preservativos. En total, el valor de los efectos intervenidos tiene un valor de 1,2 millones de euros, a lo que hay que sumar el patrimonio que aún se está investigando --ya que continúa abierta la investigación patrimonial y de supuesto blanqueo de dinero detectado--.

La operación policial se llevó a cabo, desde comienzos de año, en Sevilla, Algeciras y San Roque (Cádiz), Huelva y Madrid. López Garzón, acompañado por responsables policiales de la Jefatura Superior de Policía en Andalucía Occidental, relató que las mujeres chinas víctimas de la red era introducidas en España con la excusa de proporcionarles trabajo en restaurantes u otras actividades dirigidas por compatriotas de las mismas radicados ya en el país.

A su llegada, sin embargo, eran obligadas a dedicarse a la prostitución en distintos pisos de las ciudades en las que se actuó, encontrándose en situación de estancia irregular en España, sin contar con protección laboral ni sanitaria.

MODUS OPERANDI

La actividad de este grupo se anunciaba en la sección de 'Relax' de la prensa local y las mujeres esperaban en los pisos en los que residían hasta recibir llamadas de los clientes. Los teléfonos facilitados eran móviles controlados por chinas que formaban parte de la dirección del grupo criminal desarticulado, o alguna otra de su confianza. Derivaban los avisos a las viviendas --si bien también ofrecían 'servicios' fuera las mismas, en hoteles, por ejemplo--, fijando los precios y las condiciones. "Las mujeres víctimas no tenían voz ni voto, sólo debían ejercer su trabajo", se comentó.

Solían ofrecer citas de 20 minutos o una hora (entre 70 y 80 euros la hora en domicilio), dando otras opciones que hacían variar el coste de la sesión. El dinero obtenido se ingresaba en cuentas bancarias, que después se transferían a un banco de China --por lo que se ha pedido también colaboración a la Policía extranjera--.

En la primera fase de la operación --desarrollada entre enero y febrero pasados--, denominada 'Liaoning' porque la mayoría de las víctimas procedían de dicha zona de China, se registraron tres pisos, dos en Sevilla (en carretera de Carmona y calle Niebla) y uno en la calle Aníbal de Algeciras.

En la misma se detuvo a dos de los máximos responsables de la red, de origen chino, un hombre, X.H., detenido en Sevilla y encargado de controlar los pisos y a las mujeres en ellos empleadas; también, de recaudar dinero y canalizarlo a través de cuentas, siempre a nombre de mujeres de la misma nacionalidad. La segunda detenida fue una mujer, X.S., en Algeciras, controladora de las mujeres y recaudadora.

Asimismo, se localizó a tres mujeres chinas en situación irregular en España, de las que dos se llevaron al Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Algeciras para su expulsión. Entre los efectos intervenidos figuran 14 cuentas bancarias de distintas entidades --probándose un lucro en torno a los 500.000 euros transferidos al Banco de China--, seis teléfonos móviles, documentación, certificaciones de empadronamiento y dos pasaportes de mujeres chinas, así como miles de preservativos.

En la casa de Algeciras se localizó, en el comedor y oculto bajo un sofá, un zulo de 2 x 1'80 metros, para esconder a las mujeres en el caso de que hubiera alguna inspección y también para ejercer coacciones y graves amenazas para mantenerlas en la prostitución y evitar delaciones; con ello, conseguían "un alto grado de impunidad". El habitáculo estaba cubierto de plástico para su impermeabilización, y en el mismo se hallaron restos de comida que prueban que la estancia fue utilizada en algún momento.

En la segunda fase, realizada entre febrero y mayo, se registraron seis domicilios: Uno en Sevilla, en la calle Virgen de la Antigua; uno en Huelva, en Fernando el Católico; otro en Cádiz, en la Plaza de Asdrúbal; uno más en Algeciras, en la calle Ponce de León y otros dos en San Roque, de los que uno funcionaba como club de alterne con mujeres chinas prostitutas y que pensaban ampliar y trasladar a un local de mayores dimensiones con la finalidad de ir desplazando a otros clubes de la zona del Campo de Gibraltar.

En esta fase se detuvo a otros dos responsables de la red, una mujer china, P.W., casada con un español, el también detenido J.R.G, --ambos jefes y controladores en Andalucía Occidental--, así como a la también china S.L., mujer de confianza de ambos. El matrimonio alquilaba los pisos para la prostitución en Sevilla, Cádiz, Huelva y Algeciras; aportando como aval la nómina de J.R.G. para dar así apariencia de 'normalidad' en los contratos, alegando ante los propietarios que los alquilaban para alojar a mujeres chinas, en situación regular en España, que se dedicaban a ventas en bazares chinos o en restaurantes.

También se detuvo a S.X., ciudadana china integrante cualificada de la organización bajo dependencia directa de la china P.W.; y aA.S.M, compañero sentimental de nacionalidad española, quien ofrecía cobertura para el alquiler de los domicilios registrados en la localidad de San Roque. Además, se localizó y detuvo a otras 13 mujeres chinas en situación irregular y que ejercían la prostitución, así como a un varón chino, por estancia irregular.

Se intervinieron ocho ordenadores portátiles, con conexión a Internet y webcam para ofrecerse a los clientes por esta vía, documentación bancaria --16 cuentas y dos tarjetas de crédito de un banco belga--, 3.000 euros en efectivo, fotocopias de pasaportes de mujeres chinas y pasaportes originales de dicha nacionalidad, agendas y documentaciones varias y diez teléfonos móviles. Se comprobó además que la casa de la calle Ponce de León de Algeciras había sido adquirida recientemente por J.R.G. y la P.W. por 120.000 euros.

En Madrid, por otro lado, a comienzos de mayo se intervino en una gestoría y se detuvo a un taiwanés, C.M.I., tramitador, y a X.Z., alias 'Ely', mujer de nacionalidad china --detenida el pasado 25 de mayo por estafa y falsedad documental--, que era la propietaria de la gestoría ubicada en el barrio de Hortaleza de Madrid.

Ambos eran los encargados de falsificar la documentación de los permisos que solicitaban para las prostitutas ante la Oficina de Extranjeros de la Delegación del Gobierno en Madrid, por encargo de los jefes inmediatos chinos detenidos, cobrando a cambio una cantidad económica. Esta línea de actuación continúa en investigación sobre los permisos obtenidos fraudulentamente, conociéndose que desde 2002 hasta ahora habrían tramitado alrededor de 900 solicitudes de permisos de residencia y trabajo, todos ellos a favor de nacionales de China. La operación se inició cuando, a finales de 2005, al detectarse un incremento de estos anuncios en la prensa.