SEVILLA, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
La secretaria general de UGT-A, Carmen Castilla, ha destacado las medidas emprendidas por la Junta de Andalucía para crear empleo en el sector de la construcción, pero ha demandando "control y rigurosidad".
En su blog, Castilla define el plan de construcción sostenible presentado el pasado viernes por la presidenta de la Junta como "un buen plan", de forma que "todo lo que sea creación de empleo tendrá siempre nuestro apoyo y trabajo", aunque deja claro que "no a cualquier costa".
En ese sentido, ha dejado claro que durante todo el proceso el sindicato "estará vigilante para que el plan se lleve a cabo con todo el control y la rigurosidad necesaria para evitar errores del pasado, para evitar la especulación que acabó con la gallina de los huevos de oro".
Ha recordado la dirigente sindical que "desde hace más de tres años, UGT a través de su federación de metal, construcción y afines reclama un plan nacional de rehabilitación de viviendas, un plan de estímulo a la rehabilitación de viviendas similar al plan PIVE, el programa de incentivos a los vehículos eficientes" y que consideran "una adecuada iniciativa para reactivar el atascado mercado de la construcción en España".
Castilla ha precisado que actualmente "se calcula que el 80 por ciento de las edificaciones del país necesitan una mejora, alrededor de dos millones de viviendas pendientes de rehabilitación tecnológica, seguridad o reducción de emisiones que contribuyan a mejorar el medio ambiente".
Así, ha calculado que sólo con la rehabilitación de 200.000 viviendas se crearían 600.000 empleos directos anualmente en España, 600.000 trabajadores menos en las listas del paro, de forma que "lograríamos no solo crear empleo, también mejorar el estado de nuestro parque de viviendas y el Estado obtendría 0,80 céntimos por cada euro invertido".
"Se trata de aunar esfuerzos para reactivar juntos la economía; es una cuestión de corresponsabilidad compartida, desde las distintas instituciones hasta empresarios, sindicatos, empleados y usuarios", ha agregado Castilla, quien ha recordado que hace año y medio, se impulsó junto a CCOO la Plataforma en defensa del Sector de la Construcción, plataforma integrada no solo por sindicatos, también por asociaciones empresariales y colegios profesionales con el único objetivo de reactivar una actividad con evidentes componentes sociales y generadores de empleo y riqueza.
Ha recordado que a través de esa plataforma se ha propuesto una docena de medidas para "impulsar el sector desde todas las vertientes de la actividad, esto es, desde un plan de choque con inversión pública, de bajo coste pero alta repercusión social, hasta la revisión de infraestructuras, rehabilitación de viviendas o el establecimiento de un plan Renove en la adquisición de muebles de madera".
Castilla ha indicado que el plan que ahora propone la Junta de Andalucía "no es tan ambicioso como el que nosotros llevamos peleando desde hace años pero, al menos, es un primer paso" y agrega que "de momento conocemos as líneas estratégicas así que queda lo más importante, esto es, hacerlo realidad".
"La letra es buena, ahora que ponerle música. Creación de empleo con sostenibilidad en el plano energético y la reactivación de la construcción es una excelente combinación si se lleva a cabo", ha agregado la dirigente sindical, quien deja claro que la Administración andaluza "tendrá todo nuestro apoyo, pero debe comprometerse a obtener resultados pronto porque miles de andaluces ya no pueden esperar un mes más sin llevar un ingreso mínimo a casa".
ANTECEDENTES
Castilla que reconoce que "durante décadas" el sector "sufrió el envite de aquellos que acaudalaron fortunas a manos llenas con la especulación y en algunos casos el fraude", ha aludido a los "miles de trabajadores que el sector empleó durante décadas".
Así, ha apuntado que sólo en Andalucía la actividad relacionada con la construcción "supuso el 13 por ciento del Producto Interior Bruto en la economía de la Comunidad y los empleos directos alcanzaron los 502.700", mientras que hoy día el sector "está menguado por la caída de la producción y no consigue meter cabeza en un mercado laboral cada vez más cerrado y competitivo", de forma que "desde que comenzó la crisis casi ocho de cada diez obreros andaluces han perdido su trabajo, esto es, con 372.400 empleos destruidos desde 2007".
