Chamizo pide a Fiscalía y Junta más plazas en colegios y multas a padres que falsifican "para que no queden impunes"

SEVILLA 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Defensor del Pueblo andaluz, José Chamizo, remitió un escrito a la Consejería de Economía y hacienda y a la Fiscalía donde pide más plazas en los centros y colegios, así como sanciones a los padres que falsifican datos escolares de sus hijos, ya que "no se pueden ir de rositas ni quedar impunes", por lo que ve necesario "hacer algo, ya sean multas o sanciones", que tengan un carácter "preventivo".

Chamizo explicó que, por una parte, hay una serie de peticiones anuales de personas "que quieren tener a sus hijos en determinados centros", por lo que consideró que "lo primero es intentar que esos centros tengan más plazas".

Precisó que "muchos de esos centros son concertados", por lo que, a su juicio, "habrá que ir trabajando en que los centros públicos estén cada vez mejor dotados cada día, con comedores escolares, aula matinal o enseñanza bilingüe".

Agregó que la oficina del Defensor del Pueblo recibe quejas "aunque cada año menos", sobre padres que "para acceder a esas plazas escolares falsifican documentación", por lo que "entramos en una nebulosa extraña donde hay padres que denuncian a otros padres, contratan a detectives".

"Tenemos que ser correctos y no se puede falsificar", agregó Chamizo, quien aseveró que "aquel que falsifica no se puede ir de rositas y tiene que tener una repercusión legal, no pueden quedar impunes, porque está perjudicando y dañando los derechos a otras personas".

Para Chamizo, algún tipo de medida, como sanciones o multas "es la manera de evitar que se falsifique", de forma que, a su juicio, esas posibles sanciones "suponen más una medida preventiva que coercitiva, la gente tiene que saber que si comete fraude, la Fiscalía puede intervenir".

Precisó que actualmente cuando los padres falsifican "no se toman apenas medidas, sólo alguna medida del colegio en algunas ocasiones, pero no suele pasar nada e incluso si está el niño en la escuela y ya lleva tiempo allí, hasta pedimos que no lo cambien, pues el niño no tiene culpa de nada y no hay que cambiarlo e colegio".

"Pedimos al menos una llamada de atención por parte de los juzgados y que ese fraude no quede impune, pues de lo contrario, entraremos en una cadena muy triste en torno a un colectivo como son los niños", aseveró Chamizo.

Éste indicó que las quejas de padres por falsificación "han ido disminuyendo y en 2009 fueron entre 15 ó 20 para la provincia de Sevilla, mientras que se registraron otros casos que se denuncian pero después no se puede demostrar".