Trampa para el control del mosquito transmisor del Virus del Nilo Occidental (VNO) de la Diputación de Sevilla - DIPUTACIÓN DE SEVILLA
SEVILLA 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Sevilla ha destacado este lunes que la red de trampas desplegada por para el control del mosquito transmisor del Virus del Nilo Occidental (VNO) ha sido "clave" durante la presente campaña para la detección temprana de la actividad de estos vectores y de la circulación del virus en la provincia. El sistema, compuesto por 39 trampas distribuidas en 37 municipios, representa el 68 % de todas las operativas en Sevilla y se gestiona mediante un acuerdo entre la institución provincial y la Estación Biológica de Doñana (CSIC), cuyos especialistas realizan el seguimiento, la identificación entomológica y el análisis de las capturas.
Según ha informado la institución provincial en una nota, la red se activó en mayo y cuenta con nueve trampas situadas en los quince municipios catalogados como Zona de Especial Seguimiento, donde la Diputación desarrolla también tratamientos específicos tras la elevada incidencia registrada el año pasado. El resto se distribuye por otros puntos estratégicos de la provincia para garantizar una monitorización constante de las poblaciones de mosquito.
Estas 39 trampas se integran en un sistema provincial que se completa con 11 dispositivos de la Consejería de Sanidad, Presidencia y Emergencias, y otros siete propios del CSIC en áreas críticas. En conjunto, la red ha funcionado como un sistema de alerta temprana que ha permitido activar medidas de control a tiempo y reducir la positividad en vectores, así como la incidencia en humanos, incluso en un año especialmente favorable para la proliferación de mosquitos debido a las lluvias invernales y primaverales y a las altas temperaturas desde finales de primavera.
La Diputación prevé asimismo mantener operativa esta red hasta finales de noviembre. Durante el invierno, cuando la presencia de mosquitos disminuye, se conservarán los dispositivos en las zonas donde se haya detectado circulación del virus, con el fin de asegurar una vigilancia mínima.
El protocolo de muestreo se basa en el uso de trampas BG-Sentinel, que se instalan una vez por semana durante 24 horas en zonas sombreadas y accesibles. Estos dispositivos emplean dióxido de carbono como atrayente para simular la respiración de humanos, aves y equinos, favoreciendo así la captura de mosquitos. Las capturas se conservan en frío para su transporte y, ya en laboratorio, se identifican por especie y se reúnen en lotes de hembras de mosquitos del género Culex -competentes para la transmisión del virus- que posteriormente se analizan mediante PCR. Cualquier resultado positivo se comunica a la Consejería de Sanidad, Presidencia y Emergencias para la aplicación de las medidas previstas en el Programa de Vigilancia y Control Integral de Vectores.
El análisis de la campaña revela, según la institución provincial, un máximo estival de capturas entre finales de julio y comienzos de agosto, seguido de un descenso con oscilaciones y un segundo pico otoñal de menor intensidad. Los técnicos han detectado un retraso de hasta cuatro meses en la dinámica poblacional respecto a años anteriores y un aumento notable en el número de capturas durante el pico estival frente a 2024. El primer positivo en mosquito se confirmó el 2 de agosto en una trampa situada en Castilblanco de los Arroyos, lo que motivó su declaración como "área en alerta".
La positividad también experimentó un retraso respecto a la media, concentrándose los primeros casos en el periodo de mayor actividad, entre julio y agosto. En total, la provincia ha registrado un 16 % menos de positivos en mosquitos y un 56,3 % menos en los municipios de la Zona de Especial Seguimiento. Esta reducción se produce a pesar de que la red de muestreo ha sido más amplia que la del año anterior y de que las condiciones ambientales favorecían la proliferación de vectores.
La incidencia en humanos ha sido aún menor: solo dos casos positivos y ningún fallecido, frente a los 11 detectados en 2024, según datos de la Consejería de Sanidad.
La Diputación ha destinado seis millones de euros al contrato bianual con Tragsatec para el desarrollo del Plan de control y seguimiento de vectores transmisores del VNO, que abarca esta red de trampeo, prospecciones larvarias, tratamientos biocidas terrestres y aéreos, y acciones de comunicación en los 15 municipios de la Zona de Especial Seguimiento.