SEVILLA 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
La dirección del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) 'Paulo Orosio', con el apoyo de la Asociación de Padres y Madres de Alumnos (AMPA) del centro, ha lamentado los "múltiples" problemas que asegura se han tenido desde que se iniciaran las obras en el centro, unas obras que debían haber estado terminadas en noviembre de 2012 y que se han hecho "sin contar con la opinión de la comunidad educativa ni con las necesidades del centro". "Ahora están terminadas, pero mal hechas y conllevan un importante peligro para los menores, algo que no estamos dispuestos a tolerar", recalca, incidiendo en que "ya no sabemos como hacer que el Ayuntamiento nos escuche y soluciones la situación, tras llamadas y escritos sin respuesta".
Así, la directora del CEIP, María Eugenia Sánchez, ha señalado a Europa Press que la valla instalada, que no rodea el centro "como fue el compromiso primero al no tener presupuesto municipal, no cumple" con las condiciones exigibles a un centro con menores ni de la zona donde se encuentra de transformación social, mientras que apunta a las obras "mal ejecutadas" en los baños, donde ya se ha producido la rotura de unas de las encimeras de mármol precisamente en el aseo de los niños de cinco años y con educación especial, "con el consiguiente riesgo para su seguridad dado que están mal pegados y el material no es el adecuado, ya que debería ser de otro como la mampostería para evitar esta situación".
En este sentido, señala que se han tenido "múltiples" problemas tanto para empezar la ejecución, "porque el proyecto no contó con el centro", y ahora en su ejecución. Así, explica que las vallas son "bajas y no son tupidas, no apropiadas para un centro con menores", a lo que suma los robos que han sufrido en las instalaciones al saltarse la vallas, algo de lo que asegura "ya se había avisado". A esto suma, que hay personas que tiran botellas de cristal, incluidas de bebidas alcohólicas, entre otros elementos, contra la valla, "quedando después en el patio del centro".
Sánchez agrega que los aseos fueron colocados "tarde, ya que tenían que estar terminados en verano" y se finalizaron a mediados de mes, y "mal puestos", habiéndose producido ya el despegue de una de las piezas y rompiéndose toda la estructura posteriormente. Así, alerta de que se está poniendo en peligro la "seguridad" de los menores.
"Hace dos días se cayó unas de las encimeras de mármol de uno de los aseos, el de educación especial, y los técnicos municipales culpan a los maestros de que dejan a los niños apoyarse y pretenden solucionarlo con silicona, una forma de unión que ya hoy se está despegando", recalca, dejando claro que los elementos que se incorporan en los colegios "deben estar preparados para afrontar el trajín diario, como por ejemplo se produce la instalación de enchufes en alto para que los niños no metan los dedos o las puertas se cierran lentamente con dispositivos concretos para que no le cojan los dedos a los menores".
En este marco, señala que la comunidad educativa del centro ha sido "muy paciente" porque la obra debía haber estado terminada en noviembre del año pasado; finalmente no se hizo todo el "comprometido" cerramiento exterior, "permaneciendo en la calle Paulo Orosio el muro en ruinas"; y "no se comenzó el curso con todos los aseos terminados y encima están mal hechos". "Entendimos que no se terminara el muro porque el Ayuntamiento no tenía presupuesto y el retraso porque decían que no tenían los materiales en verano, pero es que ahora se está jugando con la seguridad de los niños", sentencia, dejando claro que se ha escrito ya al Ayuntamiento y al Distrito sin encontrar soluciones, aprobándose incluso en el claustro la medida de que no se pagaran las obras al estar "tan mal" realizadas".