En junio concluyó el periodo habilitado para que se consumara el derribo volunario de las casas en virtud a las sentencias
ARAHAL (SEVILLA), 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
Dos vecinos de la localidad sevillana de Arahal afrontan la demolición de sus chalés por "sentencia firme", puesto que los mismos se edificaron, hace ahora tres años, sobre una superficie de suelo rural que por su calificación en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) no admiten construcciones. Estos chalés forman parte de "26 núcleos" en los que se hallan unas 5.000 viviendas ilegales.
En declaraciones a Europa Press, uno de los dos afectados por el derribo de su vivienda, Manuel Rodríguez, manifestó que tras conocerse la sentencia, le dieron "dos años" para consumar la destrucción del edificio, tiempo que concluyó el pasado mes de junio, y por lo cual este vecino, junto al otro propietario del otro chalé que se prevé será destruido, Joaquín López, permanecen "a la espera".
Rodríguez afirmó que, en su día, se les informó de que si llegaban a un acuerdo con la Junta de Andalucía a través de algún tipo de "regulación", los chalés "no se destruirían", algo que no ocurrió, y por lo que en la actualidad el Ayuntamiento "no se mueve" y se está "lavando las manos", pero además, señaló, "se siguen construyendo viviendas ilegales" en el municipio.
El coordinador de la plataforma que defiende el no derribo, Luis González Luna, aseveró al respecto y en declaraciones a Europa Press que "estamos poniendo todo nuestro empeño" para que no se derriben las viviendas, y que "quietos no nos vamos a quedar". Mientras tanto, el Ayuntamiento del municipio asegura que está siguiendo las "indicaciones" de la Junta de Andalucía, realizando un plan de inspección sobre dichas viviendas y elaborando un censo de las construcciones ilegales, que calcula, estará terminado dentro de cuatro o cinco meses.
Una vez registradas todas la viviendas en dicho fichero, el Ayuntamiento lo enviará al Gobierno andaluz para que este lo incorpore, si lo cree conveniente, al Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) donde las viviendas se declararán "fuera de ordenación".
