Un estudio de arquitectura propone sortear la crisis inmobiliario convirtiendo al cliente "en promotor"

Actualizado: miércoles, 25 mayo 2016 20:37

SEVILLA, 25 May. (EUROPA PRESS) -

La reinvención del mercado inmobiliario a cuenta de la cruda crisis del sector ha generado nuevas fórmulas, como la transformación del cliente final "en promotor" en el caso de las pequeñas edificaciones y promociones, para reducir los costes hasta un 25 por ciento, según expone en un comunicado el estudio de arquitectura Honorio Aguilar.

"Hemos convertido al cliente final en promotor, evitando en los casos de edificaciones más pequeñas esta figura y ahorrándonos todos los costes que nos originaba. Al reducir la cuantía global, los compradores ven la rentabilidad y se lanzan a la compra porque saben que se trata de una buena propuesta", expone Aguilar detallando que esta fórmula funciona principalmente gracias a "la confianza que los propietarios del suelo o del edificio a rehabilitar depositan en el despacho de arquitectura, que se encarga de buscar los clientes y de preparar la división horizontal para materializarla en la notaría".

"Cuando empezamos las obras, éstas se pueden adaptar a los gustos de los compradores finales, por lo que optimizamos al máximo la inversión que hacen", explica Honorio Aguilar.

Con este sistema, defiende que su estudio ha concluido una rehabilitación en la calle Guadalquivir de la que se han obtenido cinco viviendas con piscina común, tramitando otra promoción en la calle Corredurías de la que saldrán cinco viviendas y un local, y otra en la cale Teodosio, a la que se sumará en breve una nueva promoción en la sevillana calle Feria. El tiempo de reforma suele ser el habitual en el sector, en torno a los ocho meses cuando se trata de obras de remodelación, y entre un año y año y medio cuando es un caso de nueva planta.

El perfil medio de los clientes que apuestan por esta nueva fórmula urbanística para pequeñas edificaciones es el de profesionales liberales de edad media, preferentemente parejas sin hijos o con un niño, y personas que vivirán solas. "Esta opción también está siendo muy demandada para los pequeños inversores que apuestan por comprar viviendas turísticas. Hasta dos propiedades se consideran con esta denominación, a partir de la tercera estaríamos hablado de apartamentos turísticos, y es una fórmula muy interesante porque permite a los compradores darle el mismo diseño a varias viviendas a la vez y crear oferta similar personalizada", explica Aguilar, quien colabora con Javier Díaz, de Zaid Desarrollos.