Apunta al intento de agresión por parte de un representante del sector y lamenta actitudes que toman como "rehén" a Sevilla
SEVILLA, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
El concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Sevilla, Francisco Fernández, indicó hoy que la manifestación desarrollada por los taxistas el viernes supone un acto "legítimo", pero consideró "desproporcionado" tener a la ciudad sin servicio, una situación ante la que "tendió la mano" para continuar con las negociaciones, aunque dejando de lado a los "violentos".
En declaraciones a Europa Press, Fernández entendió que la protesta es un "acto legítimo", pero consideró "desproporcionado tener a la ciudadanía sin servicio y colapsando el tráfico". El concejal, que reiteró sus disculpas "indirectas" por la situación causada, recordó que se han mantenido contactos con el sector desde "hace tiempo" y que se ha ido llegando a "entendimiento" en distintas acciones.
Sin embargo, apuntó a la existencia de "discrepancias puntuales" que llevaron a la manifestación de los taxistas el viernes, una iniciativa desarrollada "con normalidad en un contexto de pleno uso de sus derechos fundamentales".
Fernández explicó que el consistorio recibió, tras la manifestación, a una representación del sector que entregó un documento a la corporación local, momento en el que uno de los representantes de los sectores minoritarios aprovechó para "desarrollar una actitud bastante violenta, con insultos y vejaciones e, incluso, un intento de agresión física".
Afirmó que en "un momento dado" del encuentro dicho representante llegó a realizar un "intento de agresión" ante miembros del equipo de gobierno local, "que pudo ser impedida por la acción de miembros de la Policía local presentes". En este sentido, el concejal rechazo de "forma absoluta y contundente" cualquier actitud violenta contra el Gobierno y contra la ciudadanía.
Además, dejó claro que el sector está constituido por "honrados" profesionales y que las citadas actitudes "violentas que toman a la ciudad como rehén no son entendidas por parte de los ciudadanos". En este sentido, "tendió la mano" para alcanzar un acuerdo que beneficie a la ciudadanía y al sector, pero se negó a llegar a entendimiento "con violentos y con los que intentan imponer sus posiciones de forma agresiva".
Ante esta situación, Fernández instó a llegar a un "entendimiento" con los taxistas que, "al igual que otros sectores, pasan por momentos difíciles". Además, advirtió de que, si hay que invertir dinero público, será para que se preste "más y mejor servicio para los ciudadanos y los profesionales del taxi".
