Abogan por una izquierda rupturista "que no esté dispuesta a disolverse en ningún modelo de casa común por muy de moda que parezca"
SEVILLA, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los secretarios generales del Partido Comunista de España y de Andalucía, José Luis Centella y José Manuel Mariscal, respectivamente, apuestan, de cara a afrontar la Asamblea de IU o el Congreso del PCE, por priorizar lo que une a la izquierda, "lo que hace que trabajemos en una misma organización", para rechazar que se resalten y agranden las diferencias "para justificar el enfrentamiento y la configuración de bloques, con falsos debates, acusaciones, etiquetas y medias verdades para confundir".
En una carta abierta, recogida por Europa Press, señalan que "para afrontar estos momentos decisivos para la izquierda en general y para el PCE en particular", ambos dirigentes han asegurado que se van a implicar y "dejar la piel" en situar en primer lugar lo que hace que "trabajemos en una misma organización" porque lo contrario "nos lleva a terminar en un proceso de confrontación o ruptura basado en el ajuste de cuentas, imposibilitando el acuerdo".
Afirman que los documentos aprobados por el Comité Federal para su debate en esta primera fase del XX Congreso del PCE "no son en absoluto un ejercicio de ombliguismo" sino "una propuesta provocadora para el debate del PCE que, por los asuntos que se abordan, afecta al conjunto de la clase trabajadora".
Y es que, como han destacado, "la crisis del capitalismo se está tratando de resolver exprimiendo la reproducción social hasta el extremo" cuando "hay que superar el capitalismo en un proceso de emancipación consciente del conjunto de la clase trabajadora".
No obstante, el margen de los debates que abre ahora el partido con la Asamblea de IU, el Congreso del PCE y el proceso de construcción del bloque Social y Político desde la unidad popular; los dirigentes defienden que también "deben ser tiempos de acción frente a las más duras agresiones del capital y a los más brutales recortes de las libertades que se atisban en el horizonte" porque "la crisis no ha terminado".
"IU NO NECESITA SALVADORES"
Centella y Mariscal defienden la necesidad de una izquierda rupturista, "la que se ve reflejada en el discurso de las candidaturas de IU-UP de las últimas elecciones generales", que sea una izquierda "que no está dispuesta a disolverse en ningún modelo de casa común por muy actualizado o remodelado que esté, o por muy de moda que parezca".
Por eso animan al partido a debatir sobre las diferentes formas de organizarse, de concretar alianzas y de afrontar "la imprescindible renovación política y de dirección, porque aquí defenderemos posturas diferentes".
Abogan por preparar la asamblea de IU y el Congreso del PCE para debatir acerca de ideas, de propuestas, de luchas, y participar "en la construcción de poder popular a todos los niveles, para que desborde a quienes tratan de reformar el régimen y mantener el sistema, e ilusione para ser capaces de crecer en organización, en capacidad de movilización y también en perspectivas electorales".
Así, apelan a la base "para que nadie nos divida de forma falsa entre los que quieren enterrar Izquierda Unida y los que quieren salvarla" por que IU "no necesita salvadores", sino que "lo que necesitamos es asumir el reto y dar la batalla de las ideas frente al capitalismo, frente al autoritarismo, en defensa de la clase trabajadora".
"NECESITAMOS CONFLUIR"
Así las cosas, tras asumir que en la IU actual se encuentra mucho de lo mejor de la izquierda española, han indicado que "fuera de IU existen muchas personas y colectivos con los que necesitamos confluir, converger para configurar esa alternativa de ruptura que necesita la mayoría social trabajadora para conquistar una salida de la crisis social, justa y democrática".
"Y esta confluencia, esta convergencia, necesita organizarse con un debate abierto y amplio, en el que no sobra nadie sino que, por el contrario, falta mucha gente", han agregado.
Centella y Mariscal creen que en la primera fase del Congreso del PCE debe ser útil para que el partido sea "fuerte y activo", y también útil a la configuración de la unidad popular, un debate que el PCE debe afrontar "desde la necesidad de hacerlo sin intermediarios y con plena personalidad".
"Es la hora del debate sincero, sin trampas ni falsos argumentos, desde el respeto a todas las posiciones y la voluntad de unidad", han zanjado.
