Reabierto el puente metálico de San Juan para agilizar el transporte metropolitano y liberar la A-8058

La Junta asegura que los autobuses metropolitanos no serán ahora "esclavos" de las plataformas copadas por el tráfico privado

Europa Press Andalucía
Actualizado: lunes, 26 octubre 2009 18:29

SEVILLA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

El puente metálico de San Juan de Aznalfarache (Sevilla), inaugurado en 1934 y cerrado al tráfico rodado en 2007 para su remodelación como plataforma reservada para los autobuses del Consorcio Metropolitano de Transportes, ha entrado a las 06,00 horas de hoy de nuevo en funcionamiento para el flujo de autobuses metropolitanos, transporte escolar, taxis, ambulancias, bicicletas y motocicletas, lo que aliviará "un poco" la autovía Sevilla-Coria del Río (A-8058).

La delegada provincial de la Consejería de Obras Públicas y Transportes, Salud Santana, informó a Europa Press de que la infraestructura, remozada por la unión temporal de empresas (UTE) formada por Azul y Napal con un presupuesto de 4,8 millones de euros, ha sido hoy reabierta al tráfico para ocho líneas de autobuses del Consorcio Metropolitano de Transportes, el transporte escolar, las ambulancias, los taxis, las motocicletas y las bicicletas pero sólo en sentido Sevilla, porque el puente enlaza el barrio bajo de San Juan con la autovía de circunvalación SE-30.

El puente metálico, según desgranó, albergará cerca de 300 viajes diarios de los autobuses de ocho líneas del Consorcio Metropolitano habitualmente utilizadas por una media de 6.500 pasajeros al día. Estas líneas, --destacó Santana--, experimentarán un ahorro de entre cinco y diez minutos en sus trayectos porque "los autobuses no serán esclavos de las plataformas" del tráfico privado, que de otro lado comprobará como se "mermará un poco" la masificación que habitualmente sufre la autovía A-8058. "Esta autovía sufre una cantidad bastante importante de tráfico", reconoció la delegada provincial.

Así, aseguró que estas líneas del Consorcio Metropolitano agilizarán su funcionamiento gracias a este puente que, una vez que conecte su carril bici con la red de carriles bici de Sevilla a través de una pàsarela sobre la autovía SE-30, se abrirá también para vehículos de "alta ocupación" (VAO) y en sentidos alternativos hacia Sevilla o hacia el Aljarafe.

Los trabajos ejecutados por Azul y Napal han supuesto la consolidación de toda la infraestructura, la reposición de barandillas, la pintura de la estructura metálica del puente y la adaptación de la calzada, que ahora goza de iluminación, acerado, plataforma reservada para transporte público y carril bici bidireccional segregado. Además, se ha dotado al puente de un sistema de cámaras conectadas al Centro de Gestión de Tráfico de Sevilla, que controlará la circulación.

UN PUENTE CON HISTORIA

La construcción del puente de San Juan de Aznalfarache formaba parte del Plan de Mejoras del Puerto de Sevilla, redactado por José Delgado Brackenbury en 1927. Tras realizar la nueva corta del río Guadalquivir a través de la Vega de Triana, el puente era necesario para restituir el tráfico terrestre entre Sevilla y los pueblos de la margen derecha del río, sin impedir el tráfico marítimo. Para ello, se proyectó un puente con un tramo basculante que facilitaba el paso de las embarcaciones.

La obra tenía dos partes: dos viaductos de hormigón que salvaban la zona inundable y un tramo metálico sobre el cauce del río. Las obras se iniciaron el 2 de diciembre de 1929, finalizaron en marzo de 1933 y se puso en servicio a principios de 1934 para el tráfico rodado.

En abril de 1935 se dio paso al tranvía. Con la utilización hoy día del puente como plataforma reservada para el transporte público se recupera su sentido original, que fue dotar de una vía de comunicación con la capital a los pueblos situados en la margen izquierda del Guadalquivir, mediante un transporte colectivo que, en la actualidad, es la red de líneas de autobuses que conectan a diario el Aljarafe con la capital.

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