SEVILLA, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
Representantes de la ONG Rehabilitación de Marginados (Remar) mantendrán una reunión la próxima semana con el gerente de Urbanismo de Sevilla, Miguel Ángel Millán, al que solicitarán suelos alternativos para ubicar su centro tras la paralización del proyecto en 2005 en la barriada de Sevilla Este, en un solar ubicado entre las calles Flor de Albahaca y Flor de Gitanilla, así como daños y perjuicios por esta actuación, y que el colectivo ya valoró en su momento en unos 300.000 euros.
En declaraciones a Europa Press, el vicepresidente de Remar Andalucía, Francisco de Asís Gómez, indicó que, asimismo, la organización solicitará a Urbanismo una mediación para solucionar de forma "urgente" la situación en Sevilla Este, donde los vecinos vierten basuras a los terrenos que aún son propiedad de Remar, por lo que las denuncias policiales y las multas llegan a la ONG.
"Los suelos quedaron cercados y ya no son problema nuestro", indicó Gómez, que subrayó que, pese a que la intención de Remar sigue siendo la de levantar su centro de trabajo e información, "no lo haremos en Sevilla Este porque es una guerra en la que no queremos meternos".
Como propietarios del suelo y afectados por la paralización del proyecto, en un litigio que ya dura cuatro años, el vicepresidente de Remar Andalucía recalcó que está dispuesto a llegar a la vía judicial si el conflicto no se arregla por otros caminos. "Seguimos sufriendo perjuicios a un cien por mil, pero no tiraremos la toalla", agregó.
Concluyó que "Remar quiere algo para Remar, no compartir con comunidades con las que no nos une vinculación alguna". "No será un lugar de rehabilitación, sino administrativo, y ya nos dijeron que nos iban a indemnizar", apostilló.
La administración local, por su parte, ya anunció que no descarta la búsqueda de terrenos para la habilitación de una ubicación alternativa a la sede de la ONG, instando asimismo al colectivo a reclamar por la vía oficial, si así lo estima conveniente, la cantidad reseñada, según confirmaron a Europa Press fuentes de Urbanismo.
El conflicto se retrotrae a la oposición de una plataforma vecinal a la construcción de este inmueble; pese a que el Ayuntamiento se comprometió con el colectivo a dar una compensación económica por la paralización, e incluso llegó a ofrecer terrenos alternativos --se habló de la barriada de Las Letanías--, esto aún no se ha materializado.