SEVILLA, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El artista y creador Pedro G. Romero consideró hoy que el nombramiento de Fernando Roldán como nuevo director del Centro de las Artes de Sevilla (CAS) "se ha acelerado para que alguien pueda darle la mano al Rey en la inauguración de la Bienal Internacional de Arte Contemporáneo (Biacs)".
En declaraciones a Europa Press, Pedro G. consideró que "si esta vez se ha nombrado al director sin que haya un programa ni una descripción de las actividades que quiere llevar a cabo en el centro, como ocurrió cuando me nombraron a mí, es porque llegaba inauguración de la Biacs y era necesario tener a alguien que pudiera cortar la cinta y cumplir con esa función social".
El ex director del CAS afirmó que su intención es sacar a la luz pública las cuentas de esta institución a final de año para demostrar la "mala" gestión municipal que se ha producido hasta ahora.
En cuanto a Roldán, dijo que "habrá que esperar a que nombren a sus asesores y luego se presente el nuevo proyecto artístico, aunque en mi caso, cuando me presentaron como director, presentamos el programa y los objetivos".
"De momento no se sabe qué asesores tendrá, ni qué contenidos tendrá el CAS ni nada de nada, al contario que cuando me nombraron a mí, por lo que no puedo opinar sobre algo que no existe", añadió.
No obstante, dijo que "el propio Marset ha dicho que se ha buscado un perfil que sea colaborador con la Biacs, por lo que no entiendo por qué me eligieron a mí en un principio".
El ex director del Centro de las Artes de Sevilla decidió el pasado mes de junio que la decisión de "desvincularse" de este proyecto fue suya y, además, aseguró que tras haber trabajado durante tres meses en esta institución municipal, al servicio del Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS), "estoy bastante escandalizado por cómo se gestiona el dinero en el Ayuntamiento", al que acusó de "despilfarrar" los fondos públicos.
El delegado municipal de Cultura, Juan Carlos Marset, decidió prescindir de Pedro G. Romero después de que éste dijera que el Centro suspendía toda su actividad porque el delegado lo había dejado sin presupuesto.
