Sucesos.- Los chabolistas desalojados de Tablada se dispersan tras recalar en el entorno del Estadio Olímpico

Actualizado: jueves, 9 julio 2009 21:21

Unión Romaní descarta su retorno al Polígono Sur y reconoce que a día de hoy no hay "ninguna solución"

SEVILLA, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

Las familias de etnia gitana exiliadas del Polígono Sur por temor a represalias tras la muerte de un menor en un tiroteo, desalojadas del poblado creado entre el puente de Juan Carlos I y el puente de hierro de San Juan de Aznalfarache, del Charco de la Pava y de la carretera de la base de helicópteros de El Copero, se han dispersado tras recalar junto al Estadio Olímpico, donde se habrían instalado algunas de estas familias.

El secretario general de la Unión Romaní en Andalucía, Manuel García Rondón, informó a Europa Press de que él mismo acompañó a este colectivo de familias en la reunión celebrada en un solar del barrio de Los Bermejales después de que la Policía Portuaria y la Policía Nacional consumaran la orden de desalojo notificada por la Autoridad Portuaria sobre los suelos que ocupaban en un margen de la carretera que conduce a la base de helicópteros de El Copero, suelos titularidad de El Puerto.

Ante la presencia de la Policía Nacional, los miembros de estas familias exiliadas del Polígono Sur han acordado dirigirse hacia el entorno del Estadio Olímpico, en el sector norte de la ciudad, al objeto de intentar instalarse allí tras haber sido desalojados del poblado creado junto a la dehesa de Tablada, el Charco de la Pava y la carretera de la base militar de El Copero, partiendo hacia allía "sobre las 14,00 horas".

"No ha quedado ninguno en Los Bermejales, han partido hacia el Estadio Olímpico escoltados por la Policía", dijo Manuel García Rondón, quien no obstante explicó que tras visitar el nuevo enclave, se habría producido una "dispersión" de las familias, si bien algunas de ellas habrían permanecido en el entorno del Estadio Olímpico.

En ese sentido, descartó totalmente que alguna de las familias haya optado por regresar al Polígono Sur, donde la familia a la que pertenecía el menor fallecido por una bala perdida podría perpetrar una venganza, lamentando además que las autoridades no ofrezcan "ninguna solución" y los mediadores esperen aún "una reunión prometida para el lunes".

EXILIO Y PACTO DE NO RETORNO

Por temor a represalias como consecuencia de la muerte de este menor, víctima de una bala perdida, estas familias abandonaron el Polígono Sur y crearon un poblado de chabolas entre los citados puentes, donde habitaban más de 300 personas sin electricidad, agua potable o cualquier comodidad en lo que algunos agentes sociales han declarado como "emergencia sanitaria", sobre todo por los cerca de cien menores contabilizados entre el colectivo.

Dado el exilio, la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio precintó las 41 viviendas de titularidad pública en las que residían en el Polígono Sur al objeto de esclarecer su verdadero régimen de ocupación, pues posiblemente sólo tres de las familias habitaba legalmente estos pisos. No obstante, el departamento de Juan Espadas no espera finalizar hasta septiembre la investigación abierta en cuanto al régimen de ocupación de estas viviendas.

Pese a dos intentos de recuperar las viviendas, el resto de las familias del Polígono Sur acordó con este clan de etnia gitana la permanencia de los exiliados en el poblado al menos hasta el mes de septiembre, pues su regreso a la zona podría derivar en un enfrentamiento abierto con la familia a la que pertenecía el menor fallecido.