La US apoya la candidatura de Carmona (Sevilla) a Patrimonio Mundial recordando las "fructíferas relaciones" existentes

De izquierda a derecha, el alcalde de Carmona, Juan Ávila, y el rector de la Universidad de Sevilla, Miguel Ángel Castro.
De izquierda a derecha, el alcalde de Carmona, Juan Ávila, y el rector de la Universidad de Sevilla, Miguel Ángel Castro. - AYUNTAMIENTO DE CARMONA
Publicado: lunes, 4 abril 2022 17:47

SEVILLA, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

El rector de la Universidad de Sevilla (US), Miguel Ángel Castro, ha firmado la adhesión de la universidad sevillana a la candidatura de Carmona (Sevilla) para ser declarada Patrimonio Mundial por la Unesco al considerar que la localidad es "un ejemplo eminente de los procesos selectivos y modos tradicionales de asentamiento humano y de su interacción con el entorno natural, desarrollando de forma dinámica a lo largo de la historia".

En una nota de prensa remitida por el Ayuntamiento carmonense este lunes, el rector ha destacado que esta adhesión se suma a "las fraternales, intensas y fructíferas relaciones académicas con la ciudad de Carmona, que se remontan a la creación de la propia Universidad de Sevilla en 1505 por el carmonense Rodrigo Fernández de Santaella".

Por su parte, el alcalde de Carmona, Juan Ávila (PP), ha agradecido "el respaldo de la Universidad de Sevilla a nuestra candidatura que suma de esta manera un aliado clave y fundamental para el desarrollo de un proyecto que está obteniendo el reconocimiento de los ámbitos institucionales, académicos y sociales". En este sentido, el alcalde ha recordado los recientes apoyos tanto de la Junta de Andalucía, a través de una declaración de su Consejo de Gobierno, como del Pleno de la Diputación Provincial de Sevilla.

La candidatura de Carmona se centra en su paisaje cultural, patrimonial y natural, resultado de las condiciones geográficas y de la dinámica histórica que confirman la presencia ininterrumpida de diferentes culturas desde el principio de la intervención humana hasta la actualidad.

Carmona tiene evidencias de ocupación humana desde inicios del periodo calcolítico, hace más de 5.000 años. Desde ese momento, la ciudad ha estado habitada por todas las culturas documentadas en el bajo Valle del Guadalquivir, dando lugar a un "valioso legado cultural que se conserva en su arquitectura, en una rica estratigrafía en el subsuelo y en su paisaje, tanto urbano como rural".

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