ZARAGOZA 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha destacado las mejoras tanto medioambientales con el ahorro energético como de movilidad que han supuesto la instalación de elementos aislantes y de ascensores en las viviendas de Balsas de Ebro Viejo, en la calle Peña Oroel, número 2, en el barrio del Arrabal.
Santisteve ha subrayado que desde el Gobierno municipal de Zaragoza en Común (ZeC) se ha trabajado durante mandato en rehabilitación de vivienda privada, como este edificio de Balsas de Ebro Viejo en el que viven diez familias.
Estas familias han visto mejorar sus casas en el aislamiento y en la accesibilidad. "Ha supuesto un ahorro energético en calefacción y que la gente mayor disponga de un ascensor en condiciones y no se vea aislada en su propia casa por no poder bajar a la calle".
Entre los datos que ha aportado el alcalde ha dicho que se ha actuado en la rehabilitación de 765 viviendas en las que se han invertido 6 millones de dinero público que han generado casi otros 14 millones de euros de inversión para acometer estas obras, además de crear 255 empleos y mejorar las condiciones de vida de los vecinos para disponer de una vivienda dignas y producir un ahorro energético.
"Es un trabajo interesante que se suma al ámbito social", ha apuntado puesto que los vecinos han contado con ayudas que comprenden entre un 50 y un 70 por ciento, que en algunos casos ha alcanzado un 80 por ciento de subvención para la rehabilitación.
MENOS FRÍO
El presidente de la comunidad de vecinos de Peña Oroel, número 2, José María García, ha tildado de "importantes" las ventajas de esta rehabilitación, especialmente para la gente mayor que vive en pisos altos y les evita subir y bajar por las escaleras.
García ha comentado que la mitad de los vecinos tiene más de 75 años y han notado bastante la mejora en eficiencia energética porque "no hace tanto frío en las casas y se ahorra en calefacción".
Las obras de instalación del ascensor se han extendido durante unos seis o siete meses y se han acometido con ayudas del año 2016, que se concedieron en 2017 y se comenzaron a ejercitar en 2018, tras disponer de los proyectos y permisos preceptivos.
Uno de los vecinos de este inmueble, José Martín, ha afirmado que está "muy contento con la obra y encantado con el ascensor" dado que necesita del apoyo de un bastón para desplazarse.
MEJORA EL PISO Y EL BARRIO
Otro de los residentes, Jesús Espinosa, ha animado a los habitantes de edificios colindantes a hacer la obra porque es una "mejora extraordinaria" y les ha instado a que "no tengan miedo".
"Empezamos solo seis vecinos que estábamos de acuerdo, pero fuimos hablando con todos y se han ido animando". Ha insistido en que no hay que tener miedo al desembolso porque se pueden pedir préstamos, y ha informado de que el recibo de la comunidad con la cuota por la reforma asciende a 165 euros, además de que el préstamo se puede cancelar sin gastos ni penalización por el banco.
Ha subrayado que la vivienda se revaloriza hasta alcanzar los 90.000 euros frente a los 40.000 euros sin la reforma. "Es una mejora para el piso y para el barrio", ha apostillado.
PREMIO
Estos trabajos han sido recientemente reconocidos en la I Gala de los premios de la edificación, por la "singularidad de la obra, así como la relevancia social del edificio y sus detalles singulares".
Otras comunidades cercanas ya han mostrado interés y se han iniciado trabajos en las fincas número 16 y 19 de calle Pineta. Asimismo, otros edificios y viviendas de los barrios de Almozara, San José, Delicias, Las Fuentes o el Casco Histórico, entre otros distritos, se benefician ya de este tipo de ayudas.
PRÓXIMA CONVOCATORIA DE AYUDAS
Las ayudas a la rehabilitación de viviendas privadas del Ayuntamiento de Zaragoza, que en cuatro años han pasado de contar con 700.000 euros a 3,6 millones de euros de la convocatoria actual, han sido una de las apuestas de la actual Corporación.
En esta nueva convocatoria, que se aprobará en las próximas semanas, se siguen las líneas abiertas en las anteriores bases, con cuarto líneas diferenciadas según tipo de actuaciones y niveles de renta.
La primera línea estará dirigida a actuaciones que incluyan mejoras de eficiencia energética en edificios construidos antes de 1980, es decir, los que no contaban con aislamiento porque aún ninguna normativa lo exigía. Cumpliendo esta condición, también podrán acometer obras de accesibilidad (ascensor) y conservación. Las ayudas rondan un 50 por ciento.
La segunda línea complementa a esta primera y la pueden solicitar personas con renta limitada que participen en comunidades que estén llevando a cabo obras de las descritas anteriormente. La ayuda puede alcanzar, en total, un 70 por ciento de los gastos.
La tercera línea está dirigida a comunidades de propietarios o propietarios de unifamiliares, en cualquiera de los dos casos vulnerables, y pone el foco en actuaciones de cierta emergencia técnica, priorizando órdenes de ejecución o situaciones de riesgo estructural.
Por último, la línea cuarta, que es la única que subvenciona obras en el interior de la vivienda, está también dirigida a personas vulnerables con rentas limitadas y para obras de eficiencia o accesibilidad. En los casos de vulnerabilidad demostrada es posible llegar hasta un 80 por ciento de subvención.
Los ahorros en la demanda de calefacción por año que suponen estas mejoras alcanza los 80.419.816,40 kilovatios por horas al año; mientras que el ahorro de emisiones anuales de Co2 es de 29.092.723,52 kilos y los árboles necesarios para absorber el CO2 ahorrado serían 2.909.272,352 ejemplares.