ZARAGOZA, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes de las Cortes de Aragón rechazó esta mañana una proposición no de ley del Grupo Popular contra la pérdida de calidad del servicio ferroviario que une la ciudad de Huesca con la de Zaragoza, una iniciativa presentada meses atrás que hoy modificó sobre la marcha el portavoz del PP en la Comisión, Antonio Torres, para conseguir el voto de los restantes grupos de la oposición.
PSOE y PAR rechazaron la iniciativa que, en su redactado final, exigía al Gobierno de Aragón que sólo firme con RENFE aquellos convenios "que supongan una mejora" de los horarios, precios y frecuencias de la línea Huesca-Zaragoza para que resulten "atractivos" a los usuarios.
Torres explicó que el pasado 23 de septiembre de 2009 se hizo público, poco antes de ultimarse el nuevo convenio de RENFE con el Gobierno de Aragón, que las lanzaderas del modelo Avant que unen la ciudad de Huesca con Zaragoza iban a ser sustituidas por trenes regionales, de peor calidad, lo que motivó la reacción de partidos políticos, instituciones y organizaciones sociales.
El parlamentario del PP atribuyó la escasa utilización de las lanzaderas a la dificultad que ofrecen los horarios de este servicio ferroviario a los trabajadores y estudiantes que viven en una ciudad y desempeñan su labor en otra para compatibilizarlos con sus ocupaciones. Antonio Torres lamentó que "no existe interés por que el ferrocarril tenga éxito en Aragón" y criticó a RENFE por cerrar estaciones ferroviarias en la comunidad autónoma.
Antonio Torres aseveró, por otra parte, que los proyectos de reapertura del paso ferroviario internacional de Canfranc (Huesca) y la construcción de la travesía central del Pirineo (TCP) están "absolutamente varados", tras lo que avisó de que RENFE pretende cerrar las líneas deficitarias, lo que significa que "en un plazo de cuatro o cinco años en comunidades como Aragón no quedará ni un solo tren de carácter regional".
El diputado de Chunta Aragonesista (CHA), Bizén Fuster se preguntó si RENFE "hace todo lo posible para que los trenes vayan ocupados" y pidió servicios ferroviarios "con buenos horarios, con descuentos, que se adaptaran a las necesidades" de los ciudadanos. De las lanzaderas Avant que conectaban Zaragoza con Huesca dijo que no prestaban unos servicios "razonables", de ahí que hayan sido sustituidos por los regionales.
Bizén Fuster dijo que satisfacer las demandas de los ciudadanos es imprescindible "si se quiere que vayan ocupados" los trenes. El parlamentario de CHA opinó que "con una mejora de horarios, los usuarios de ese tren se multiplicarían" y añadió que "está estudiada" la población que tomaría el tren que une la capital aragonesa con Huesca.
El diputado de Izquerda Unida (IU), Adolfo Barrena, argumentó que el PP "ha sido entusiasta defensor" de la privatización de servicios, como es el caso del transporte público, tras lo que constató el deterioro de los servicios ferroviarios. Barrena acusó al PP de querer hacer un "círculo cuadrado" al defender a la vez el recorte de impuestos y el impulso a los servicios públicos.
El socialista Ricardo Berdié pidió la retirada de la iniciativa parlamentaria porque "no se sostiene por ningún lado" y negó que se esté perdiendo calidad en el servicio. Berdié manifestó que el tren sólo recorta entre seis y ocho minutos del tiempo de recorrido respecto de los autobuses y el coste económico es unos tres euros menor en el caso del autobús.
El diputado del Partido Aragonés (PAR), Javier Callau, dijo que hay 30 autobuses de línea que unen las dos ciudades, diariamente, tras lo que opinó que muchos ciudadanos no tomarían el tren aunque se reforzara el servicio porque el autobús tiene varias paradas en Huesca y Zaragoza, lo que permite a los usuarios elegir dónde bajan, lo que no ocurre en el caso del tren, que sólo puede parar en la estación. "Esa masa crítica que existe no puede viajar en tren" enteramente, proclamó. El PAR no apoyó la iniciativa.
