El himalayista Carlos Pauner confía en que esta vez conseguirá hacer cima en el Manaslu

Carlos Pauner en el Manaslu
CARLOS PAUNER
Actualizado: domingo, 29 agosto 2010 11:30

ZARAGOZA, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

El himalayista aragonés Carlos Pauner confía en que en este segundo intento conseguirá hacer cima en el Manaslu, ya en su primer intento, se quedó a escasos 60 metros, debido a un cambio brusco en las condiciones meteorológicas.

El montañero ha recordado la anterior expedición al Annapurna diciendo que "nunca olvidaremos lo allí sucedido, ni lo bueno ni lo malo, pero hay que continuar hacia delante y seguir nuestro camino".

De nuevo, Pauner se dispone a regresar al Himalaya para perseguir "otro sueño, otra quimera y volver a cabalgar por esa delgada línea que separa el éxito del fracaso, la vida de la muerte".

El Manaslu, de 8.163 metros, podría se un lugar idóneo para ello, ya que este gigante de Nepal ya es un viejo conocido para el alpinista. En la primavera de 2009 tuvo que renunciar a él a escasa distancia de la cima, debido al frío y al viento que desaconsejaban continuar.

"El Himalaya es así. En ocasiones y pese a todo el esfuerzo realizado, se nos niega la cima, punto culminante de nuestras expediciones y saber comprender estas situaciones es parte de nuestra capacidad de supervivencia en la cota extrema. Las ganas de coronar esta cima han permanecido en mi interior todo este tiempo y ha llegado la hora de zanjar este asunto", ha explicado Pauner.

Por ello, el próximo día 30 de agosto partirá hacia Nepal donde les recibirán sus colaboradores, convertidos en "verdaderos amigos a estas alturas de la vida".

"Tras chequear las cargas, prepararemos el material, cerraremos las pertinentes autorizaciones y nos instalaremos al pie del Manaslu, donde trabajaremos en los campos de altura y si todo sale según lo previsto, hacia finales de septiembre me encontraré otra vez en ese punto situado a casi 8.100 metros donde tomé la difícil pero acertada decisión de dar marcha atrás".

"Espero, un año después de aquel momento, poder volver a observar tan cercanos esos metros finales y que todos los anteriores elementos sean positivos y me inciten a seguir, a arañar paso a paso cada uno de esos metros a la montaña y colocar mi extenuado organismo a esa cota privilegiada y mítica que marcan los 8.163 m de la cima del Manaslu".

"Tengo la ilusión de que será así. Me he preparado para ello y conozco bien casi todos los secretos de esta cumbre. Espero que la climatología nos acompañe un poquito y que desde aquí, os pueda narrar grandes jornadas de alpinismo en la altura extrema y enseñaros como se ve el mundo desde ese lugar tan especial de nuestro planeta. Voy a luchar por que así sea", ha concluido el alpinista.