ZARAGOZA, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El concejal de Vivienda del Ayuntamiento de Zaragoza, Pablo Híjar, y la concejala de Participación y presidenta de la Junta de Distrito de Oliver-Valdefierro, Elena Giner, han presentado el programa territorial sobre alojamiento y calidad de vida en el barrio Oliver, que pretende "generar un nuevo modelo de intervención a través de la coordinación más intensa y efectiva" de los distintos servicios que presta la sociedad municipal Zaragoza Vivienda.
Así lo ha expuesto el consistorio en una nota de prensa, en la que ha precisado que este programa tiene en cuenta las características concretas del barrio y está pensando para que pueda extenderse la experiencia a otros distritos de la ciudad.
Esta iniciativa servirá también de "refuerzo" para el Plan Integral del Barrio Oliver (PIBO) y para su consecución se contará con el personal técnico del servicio de gestión social de Zaragoza Vivienda, el personal del centro comunitario del barrio y la nueva incorporación de una trabajadora social.
Uno de los objetivos del programa, según ha destacado Híjar, es acercar más a los vecinos la gestión municipal de cuestiones relacionadas con los derechos sociales, "llevando a los barrios el trabajo en red de Zaragoza Vivienda".
Del mismo modo, la concejala Giner ha explicado que el programa tratará de reforzar la dimensión comunitaria a la hora de abordar los problemas del barrio, desde una visión de conjunto y para que sus vecinos "sean partícipes en el diseño de las propuestas de acción, para trabajar con la gente y desde la gente".
Para el desarrollo del programa territorial, Zaragoza Vivienda ha tenido en cuenta las características concretas del barrio, en el que existe "un importante número de viviendas cuyas condiciones de habitabilidad son deficientes" y donde "es fácil encontrar situaciones de sobreocupación".
Desde el Ayuntamiento han detallado que "algunas viviendas que hasta hace poco daban humilde cobertura a sus residentes, ahora se convierten en infravivienda ya que han de ocupar todos los espacios estén o no en buenas condiciones de habitabilidad", situación en la que se encuentran especialmente "personas mayores que han de acoger a hijos, nietos u otros familiares".
PRECARIEDAD
Zaragoza Vivienda ha constatado que la crisis económica ha incrementado la precariedad de las familias y ha generado "un mayor índice de subarriendo de habitaciones", mientras que hay comunidades de viviendas de más de 50 años de antigüedad que "no han tenido un mantenimiento adecuado".
Las acciones y servicios que van a coordinarse en este programa son el apoyo social y económico a la vivienda, con un programa de apoyo económico para el pago del alquiler de viviendas sociales y el programa de seguimiento social.
Con el primero de ellos, Zaragoza Vivienda ha reducido en torno a un 20 por ciento el alquiler medio en todo el parque público de vivienda y, además, se ha constituido una línea de ayudas directas al alquiler para que las familias no paguen de alquiler más del 30 por ciento de sus ingresos, para lo que se ha establecido una renta mensual mínima de 85 euros al mes, incluyendo gatos de comunidad.
El programa de seguimiento busca "facilitar el acceso a un nivel de calidad de vida digno", para lo que se requiere habitualmente un apoyo social que facilite la información, orientación, derivación y acompañamiento a las personas y familias que residiendo en estas viviendas puedan necesitar recursos económicos, sociales, educativos, culturales, de apoyo personal y familiar, entre otros.
Otro objetivo es intensificar el trabajo desde el Centro Comunitario Oliver, "referencia en el barrio para el apoyo a personas y grupos que tienen dificultad para participar y relacionarse con el entorno".
Su intención es proporcionar a los residentes atención personal y social de acuerdo a un plan de trabajo individualizado que incluye aspectos como la ayuda a la organización doméstica, el aprendizaje de hábitos de higiene o alimentación, el acompañamiento en caso que sea necesario.
ALOJAMIENTOS COMPARTIDOS
El Ayuntamiento de Zaragoza ha señalado que otra línea de acción es el programa de alojamientos compartidos, motivo por el cual se han puesto en marcha tres pisos compartidos, dirigidos a personas que libremente opten por la convivencia, de forma que se rentabilizan recursos, se evitan situaciones de aislamiento y soledad, promoviendo la ayuda mutua, se favorece que titulares de ingresos bajos puedan afrontar de la mejor manera posible los gastos de arrendamiento y se contempla un seguimiento en red, han apuntado desde el consistorio.
La propuesta de inquilinos y selección de compañeros para compartir cada vivienda se ha realizado en colaboración con los centros municipales de servicios sociales de Oliver y Delicias.
Por otra parte, entre septiembre de 2015 a septiembre de 2019 están en vigor el Programa Europeo Buildheat, que ha sido aprobado por la Unión Europea dentro de la Iniciativa HORIZON 2020 con el objetivo de estandarizar soluciones y productos para la rehabilitación de viviendas.
Además, Zaragoza Vivienda colabora con varias entidades sociales --la asociación de vecinos Aragón de Oliver, Adunare, Consolida Oliver, Fundación Down, ATADES y Bezindallla Cooperativa--, acción que quiere que sea "más intensa y participativa" y que también persigue un mayor "esfuerzo" en el refuerzo de la Oficina de vivienda y dar a conocer en el sus programas de mediación en deuda hipotecaria, de deuda de alquiler y la asesoría energética.
Los concejales de Vivienda y Participación han hecho hincapié en atender las necesidades incidiendo sobre sus causas y con enfoques transformadores.
200 VIVIENDAS DE ALQUILER SOCIAL
El Ayuntamiento ha recordado que Zaragoza Vivienda gestiona en el barrio Oliver y su entorno 53 viviendas sociales, 38 con servicios comunes, 19 de compra aplazada, 27 cedidas por entidades financieras y otras 50 diseminadas. Son casi 200 viviendas de alquiler social. Además, ha construido y adjudicado 384 viviendas protegidas en régimen de compra.
En el conjunto de la ciudad, la sociedad municipal cuenta con un parque de más de 2.500 viviendas en alquiler, de las cuales 1.700 son viviendas sociales, la mayor oferta pública en la ciudad para arrendamiento de este tipo de alojamiento.
