La Audiencia absuelve a un hombre para el que solicitaban 12 años y medio de cárcel por tráfico de droga

OVIEDO 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Sección Octava de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Gijón, ha absuelto a un ciudadano de nacionalidad marroquí para el que la Fiscalía solicitaba doce años y medio de cárcel por dos delitos de tráfico de droga y atentado y una falta de apropiación indebida.

El acusado, defendido por el letrado José Manuel Fernández González, ha sido condenado por una falta de desobediencia leve al pago de una multa de 600 euros con arresto sustitutorio de treinta días en caso de impago. El juicio se celebró en la Audiencia de Gijón el pasado 8 de julio.

Según el relato de los hechos del Ministerio Fiscal, el procesado regentaba un bar en la calle Eladio Verde de Gijón y "aprovechando los horarios de apertura al público vendía en el interior del establecimiento la sustancia estupefaciente cocaína a los clientes".

De acuerdo a la Fiscalía, el 1 de octubre de 2008, los agentes le detuvieron en dicho establecimiento con dos papelinas con 0,68 gramos de cocaína, 389 euros, un hacha, un cuchillo árabe de 17 centímetros, una catana de 49 y un tarjetero.

En el fallo al que ha tenido acceso Europa Press, el magistrado le absuelve basándose en la aplicación del principio 'in dubio pro reo' al considerar que "no hay prueba suficiente de que ni el procesado ni otra persona vendieran droga en el bar".

A su juicio, las pruebas que obran en la causa son "insuficientes para llegar a una conclusión exenta de duda razonable" porque "nadie vio ni oyó decir que el acusado traficase allí, no se sabe cuantas papelinas tiró al retrete, ni si contenían droga y la cantidad de sustancia intervenida al procesado es muy pequeña para deducir que era para traficar y no para el autoconsumo".

Respecto al delito de atentado, el juez defiende que "el procesado no atacó, ni agredió, ni lesionó a ningún Policía ni intentó huir o se resistió a la detención". "Su actitud se dirigía más a deshacerse de la droga que a agredir al declarante", concluye. Por último, le absuelve de la falta de apropiación indebida "al no existir prueba alguna de tal supuesta infracción".