OVIEDO 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía del Principado de Asturias solicita una condena de doce años de prisión para un acusado de matar a un hombre en La Barraca, en Ciaño (Langreo), en el mes de abril de 2010. Según la versión fiscal, J.M.G.G. clavó una navaja a J.F.B., con quien mantuvo un forcejeo, después de que la víctima acudiera a arrancarle los postes de un linde.
Según indica la Fiscalía, la vista oral se celebrará ante un Tribunal de Jurado en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, con sede en Oviedo. No consta aún si hay fecha ya fijada para la misma.
El es nacido en 1945 y sin antecedentes penales. J. M. G. G. y la víctima, J. F. B., eran vecinos en la localidad de La Barraca, Ciaño (Langreo). Ambos habían tenido enfrentamientos por un problema de los lindes entre sus propiedades.
La Fiscalía mantiene que el 12 de abril de 2010, sobre las once y cuarto de la noche, J. F. B. salió de un bar y se dirigió en su coche a una finca propiedad del acusado y empezó a arrancar unos hierros que hacían de linde con el camino. Al oír los ruidos, J. M. G. G. salió de su casa para ver qué ocurría y recriminó a J. F. F. lo que estaba haciendo. Éste se negó a parar.
El acusado se dirigió a casa de su hijo y le pidió que llamara a la Policía. Acto seguido, regresó hacia su domicilio pero, al ver cómo J. F. F., que estaba de nuevo en su coche, paraba delante de la portilla de entrada a su casa y se bajaba del vehículo, cogió una pala de dientes y la esgrimió frente a la víctima, de forma amenazante. Cuando J. F. B. se dirigió hacia él, le golpeó con ella, rompiéndose la pala por el mango. Entonces se inició un forcejeo entre ambos, durante el cual J. M. G. G. sacó del bolsillo de su cazadora una navaja con una hoja de 13 centímetros de largo y 2,3 de ancho y, tras abrirla, se la clavó a J. F. B. en el costado derecho, con la intención de causarle la muerte o a sabiendas de que podía causársela. La navaja le perforó completamente el ventrículo izquierdo, causándole la muerte.
El hijo del acusado pidió a su esposa que llamara a la Policía, cogió de la cocina una pistola de fogueo y salió al exterior de su casa. Al ver a su padre y a J. F. B. forcejeando, disparó la pistola en dos ocasiones al aire para intentar que cesaran. A continuación, como vio a su padre que intentaba trepar por el prado al que se había precipitado con la víctima durante la pelea, le ayudó a su subir. Instantes después, llegó la Policía.
J. F. B. tenía 39 años, estaba casado y tenía una hija que en ese momento tenía 9 años. La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de homicidio del artículo 138 del Código Penal. Además de la pena de prisión, el Ministerio Público solicita que el acusado abone las costas derivadas del proceso y que indemnice a la esposa del fallecido con 160.000 euros y a su hija con 90.000 euros.