Advierten del riesgo de la viabilidad de las empresas y de sus trabajadores
SANTANDER, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los conserveros del Cantábrico han reiterado su "preocupación" por la reducción de la talla de la anchoa capturada año tras año, una circunstancia que se viene dando desde 2010 cuando se abrió el caladero y que consideran un hecho "muy negativo" para la sostenibilidad presente y futura de una pesquería que es "fundamental" para el sector pesquero, extractivo y transformador.
Así, CONSESA ha indicado en un comunicado que el sector conservero del Cantábrico a día de hoy ya "está careciendo de anchoa de suficiente tamaño para sus elaborados" por lo que, "de no conseguir pesca para salazonar y que vaya madurando durante los próximos meses, la viabilidad de las empresas y la continuidad de sus plantillas, en su mayor parte trabajadoras, estará en grave riesgo".
En este sentido, la asociación ha recordado que la Política Pesquera Común de la Unión Europea tiene como objetivo, entre otros, "garantizar que la actividad de la pesca contribuye a la sostenibilidad medioambiental, económica y social a largo plazo".
Por ello, desde CONSESA han solicitado a los organismos públicos competentes que "se tomen las medidas necesarias para analizar las causas de esta progresiva reducción de la talla media de la pesca capturada, así como que se busquen soluciones urgentes para revertir este proceso".
"Consideramos que el acuerdo alcanzado por el sector extractivo para limitar la talla mínima de la anchoa a un máximo de 50 peces por kilo con un margen de tolerancia del 10% es un punto de partida para llevar a cabo una pesca más lógica y racional de la anchoa, pero entendemos que aún siendo un acuerdo de buena voluntad, se debería limitar está talla a 45 peces/kilo, con el objetivo de darle una mayor protección a este escaso e insustituible recurso natural", ha concluido.
