CANTABRIA.-San Vicente.- El Ayuntamiento propone reducir el gasto corriente para mantener "intactas" las partidas sociales

Ayuntamiento de San Vicente
AYUNTAMIENTO
Europa Press Cantabria
Actualizado: viernes, 28 noviembre 2014 14:39

SANTANDER 28 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de San Vicente de la Barquera ha propuesto reducir el gasto corriente para mantener "intactas" las partidas sociales, de cara al presupuesto municipal de 2015, que llevará a Pleno el próximo lunes, 1 de diciembre, y al que el grupo socialista ha presentado enmienda a la totalidad.

El documento, que contempla cifras "similares" a las de 2014, con 3.695.660 euros de ingresos y 3.524.800 de gastos, prevé un aumento de las partidas sociales, junto con la congelación o asunción de la subida de impuestos, lo que obliga a reducir el importe de los gastos corrientes.

"Eliminamos lo que no es imprescindible para poder seguir con la atención social a los vecinos", ha explicado el alcalde, Julián Vélez, para concretar a continuación que se elimina la regata a Pornichet, el karaoke y la colaboración con el Festival Internacional de Santander. El certamen de la Canción Marinera se mantiene, pero con recortes en su costo.

Con esto, el equipo de Gobierno propondrá mantener todas las partidas destinadas a los fondos sociales que ya hay en el presente ejercicio 2014, es decir, "mantener intacto el importe dedicado a la ayuda a domicilio".

Y es que para el regidor y los miembros de su equipo, el conjunto de gastos destinado a fondos sociales es "intocable". Además, el gobierno municipal propondrá otras partidas "similares" con destino a la comunidad de vecinos, como la tutela del Hogar del Jubilado, Teleasistencia o la ayuda para la compra de libros, material escolar y becas para estudios en Santander.

La propuesta del equipo de gobierno incluye además mantener todas las subvenciones a las asociaciones del municipio, así como las ayudas a los programas de ocio y deporte durante las vacaciones escolares.

Por otra parte, el Ayuntamiento asumirá la subida de los impuestos sobre el agua y la recogida de residuos sólidos, para que estos incrementos "no recaigan en los vecinos". Así, el IBI, que el Estado eleva un 10%, quedará contrarrestado con la bajada del 9% que propone el gobierno municipal, para que el recibo que llega al ciudadano "no sufra ningún incremento".

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