La Asociación de Mujeres de los Pueblos reclama especial atención para las víctimas de violencia en el medio rural

Actualizado: martes, 8 mayo 2007 19:38

SANTANDER, 8 May. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Mujeres de los Pueblos de Cantabria (AMPC) reclamó hoy "especial atención y suficientes recursos para ayudar a las mujeres víctimas de violencia en el medio rural". A través de un comunicado, mostró su consternación por la muerte de Gina Calderón, a manos de su pareja sentimental y llamó la atención sobre "la incidencia de los malos tratos en el ámbito rural".

Según explicó la Asociación en una nota, "en España casi 5 millones de mujeres viven en el medio rural, en municipios con menos de 10.000 habitantes, y según datos del 2004, un 40% del total de mujeres que mueren víctimas de violencia, vivían en zonas rurales".

La presidenta de la Asociación de Mujeres de los Pueblos de Cantabria (AMPC), Nieves Gutiérrez ha mostrado su consternación ante la muerte de Gina Calderón, la mujer que ayer fue apuñalada por su pareja en la localidad de Carrejo, y que constituye la primera muerte por violencia de género producida en Cantabria desde que, en 2004, fueran asesinadas Elisa Calderón y Sandra Pinto.

La AMPC hizo un llamamiento a las administraciones públicas, reclamando "más atención y suficientes recursos para ayudar a las mujeres víctimas de violencia en el medio rural". "A la vista de los datos, es fundamental tener en cuenta las especificidades de las zonas rurales en el diseño e implementación de las nuevas medidas desarrolladas por la Ley Integral Contra la Violencia", explicó.

"Debemos tener claro que la violencia de género no desaparecerá mientras no acabemos con la discriminación que las mujeres sufrimos en esta sociedad, hay que seguir trabajando en un cambio profundo de actitudes y patrones socioculturales que siguen perpetuando en nuestra sociedad, y sobre todo en el mundo rural", afirmó.

La Asociación denunció "la clara situación de desigualdad en la que se encuentran las mujeres rurales ante la violencia de género" y explicó que "el problema se multiplica" en los pueblos porque se trata de "un entorno muy reducido y muy sexista, que lleva muchas veces, por miedo, por vergüenza, o por falta de cobertura de los servicios sociales, a que se oculten las trágicas verdades de la violencia doméstica, hasta que, por desagracia, ya es demasiado tarde".