GUADALAJARA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
Jesús Abad, compañero de los fallecidos el 17 de julio de 2005 en el incendio iniciado en La Riba de Saelices (Guadalajara) aclaró hoy, en un comunicado, que el acto celebrado ayer en Santa María del Espino, organizado por él mismo como homenaje, tenía un caracter "íntimo y emotivo".
Tras las críticas vertidas por los ayuntamientos de Anquela del Ducado y Mazarete con la forma de actuar del Gobierno regional y su participación en un acto de homenaje "secreto", Abad explica que fue él mismo el que encargó una estatua en memoria de los fallecidos.
Así, asegura que al acto de inauguración invitó a los familiares y amigos "que durante todo este tiempo han estado a mi lado en los momentos más duros", entre los que cita a su familia; los familiares de Pedro Almansilla; los alcaldes de Anguita, Claudio Sancho y La Riba de Saelices, José Luis Samper; vecinos de la zona, el vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, Fernando Lamata, el consejero de Medio Ambiente y Desarrollo Rural, José Luis Martínez Guijarro.
Respecto a la estatua aclara que con ella, "además de honrar la memoria de los once compañeros que fallecieron a mi lado luchando contra las llamas, pretende ser mi homenaje también a todos aquellos que arriesgan sus vidas con valor y entrega defendiendo nuestros montes y bosques".
