Un informe del Defensor del Pueblo destaca el "deterioro general" de un centro para menores de Azuqueca (Guadalajara)

Actualizado: lunes, 2 febrero 2009 20:04

GUADALAJARA/MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, destapa en un informe monográfico sobre los centros de protección de menores con trastornos de conducta y en situación de dificultad social, el "deterioro general" que presenta el centro Casa Joven Juan Carlos I, ubicado en Azuqueca de Henares (Guadalajara), y gestionado por la Fundación O'Belén.

El informe, al que ha tenido acceso Europa Press, también estudió en Castilla-La Mancha el centro Nuestra Señora de la Paz, ubicado en Villaconejos de Trabaque (Cuenca), y gestionado por el mismo organismo.

El estudio cita al centro Casa Joven Juan Carlos I de Azuqueca como "prácticamente abandonado" en comparación con otros "impecables", mientras que en materia de comunicación en transporte público, destaca las deficiencias del centro conquense, donde los propios educadores se encargan de llevar y traer a los menores y familiares.

Aunque, en términos generales el estudio recoge que el estado de conservación de las instalaciones de los centros visitados es aceptable, destaca "por su mal estado, Casa Joven (Guadalajara), el Hogar de Socialización El Parral (Burgos), y el centro Chavea (Pontevedra)".

En el caso concreto del centro de la provincia de Guadalajara, destaca "el deterioro general de las instalaciones, particularmente el mal estado de techos --en la mayoría hay agujeros--, paredes, puertas y ventanas, y, en ocasiones, la falta de limpieza de las habitaciones de los menores".

"En la visita, los menores denunciaron que llevaban dos semanas sin agua caliente, de lo que la Dirección dijo no tener conocimiento. Asimismo, es notable la mala ventilación, al tener ventanas blindadas y no poder abrirse, a lo que hay que añadir además el mal olor procedente de un husillo en medio del salón".

"En definitiva, urge llevar a cabo importantes reformas para hacer más habitable el recinto. A este respecto, cabe resaltar el hecho de que, dos meses antes de nuestra visita, la Administración cursase una inspección, recogiendo en el acta levantada una buena valoración de las instalaciones, especialmente del salón y las habitaciones de los menores, así como la satisfacción de los menores con la atención prestada en el centro, lo que se contradice radicalmente con las conclusiones que pudimos obtener en nuestra visita".

ENTORNO NORMALIZADO

El estudio distingue entre los centros cuyo objetivo es integrar a los menores en un entorno "normalizado" y crear un ambiente familiar y hogareño, "y aquellos otros que, por el contrario, optan por un sistema rígido y cerrado y con una "estructura contenedora", habitualmente con grandes espacios, personal y puertas de seguridad", como sucede en el caso del centro de Cuenca.

También en este centro, el informe destaca que las distintas dependencias suelen estar separadas por puertas de seguridad que son abiertas y cerradas por el personal de seguridad o por los educadores "lo que acrecienta la sensación de falta de libertad".

Además, destaca que este centro "tiene la particularidad de acoger menores en cumplimiento de medidas judiciales de reforma --8 plazas-- y menores de protección --7 plazas-- en un mismo recinto, por lo que los menores de protección "se ven obligados a convivir en un espacio más opresivo del habitual".

INFORME

Con caracter general, el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, destapa en el informe monográfico sobre los centros de protección de menores con trastornos de conducta y en situación de dificultad social que "muchos" de ellos vulneran sus derechos, maniatándoles, prohibiéndoles la asistencia al centro escolar o la salida al patio durante una semana, bajo la denominación de 'medidas educativas creativas' o 'medidas correctoras'.

El texto, que será remitido a la Comisión Mixta Congreso Senado de relaciones con el Defensor del Pueblo, revela, además, que la gran mayoría de estas instituciones de menores llevan a cabo contenciones físicas, contenciones mecánicas y medidas de aislamiento, así como que en el 75 por ciento de las mismas suministra tratamiento farmacológico a los menores en casos de grave alteración.